Por Orlando Segura Hervert.
Falsa alarma, aproximadamente a las 11 de la mañana de éste sábado, aparecieron las sirenas de los bomberos frente a la zapatería Flexi, ubicada en la calle Juárez y Mina, dos camiones y personal de los apagafuegos actuaron con prestancia, no hubo siniestro, nada de que lamentarse, solo un olor a quemado y tal vez una balastra que provocó ruido, movilización y la actuación de los órganos de seguridad. César del Valle, reportero de un medio local y de otras instancias gubernamentales, un celoso de su deber, quería la primicia y llegó echando pestes, “tú que haces aquí, no se supone que debes estar en otro lado”, al de la Opinión no le dijo nada, se entiende que hay valores entendidos, entre colegas podrán destruirse, pero nunca hacerse daño. El famoso Negro como le dicen sus más cercanos amigos, se “arroldanó”, empezó a sonreír y una vez concluido el supuesto inicio de incendio, se retiró al restaurante El Quijote, en donde daba una conferencia el diputado local por el Partido del Trabajo, Julio Chávez Hernández.
Falsa alarma, aproximadamente a las 11 de la mañana de éste sábado, aparecieron las sirenas de los bomberos frente a la zapatería Flexi, ubicada en la calle Juárez y Mina, dos camiones y personal de los apagafuegos actuaron con prestancia, no hubo siniestro, nada de que lamentarse, solo un olor a quemado y tal vez una balastra que provocó ruido, movilización y la actuación de los órganos de seguridad. César del Valle, reportero de un medio local y de otras instancias gubernamentales, un celoso de su deber, quería la primicia y llegó echando pestes, “tú que haces aquí, no se supone que debes estar en otro lado”, al de la Opinión no le dijo nada, se entiende que hay valores entendidos, entre colegas podrán destruirse, pero nunca hacerse daño. El famoso Negro como le dicen sus más cercanos amigos, se “arroldanó”, empezó a sonreír y una vez concluido el supuesto inicio de incendio, se retiró al restaurante El Quijote, en donde daba una conferencia el diputado local por el Partido del Trabajo, Julio Chávez Hernández.
No hay comentarios:
Publicar un comentario