jueves, 6 de marzo de 2008

AD EFESIOS...



Para Vaxtuxpan

Fernando Morales Rocha
Ya decía que el que dicen que sí es parece que no es; sin embargo al “otro” se le acomoda mejor al prototipo desparpajado del burrasno del que afirman que es. Aunque el otro combina el desparpajo con lo florido ¿Será que no es?
Lo que es evidente, que más de alguno quiere ser él, pudiendo ser miguelas, juancarlas, jacarandas, panchas, camilas u otra cosa.
Que feo ha de ser querer ser lo que no se es o pretender ser lo que no se puede ser, pero en fin, allá ellas y su mala cabeza.

Suplantación-Usurpación
La suplantación de personalidad (phishing) es un tipo de embaucamiento o estratagema diseñado con la finalidad de robar, engañar y confundir. No es el algo nuevo. Es algo que en el tiempo ha sido utilizado como recurso para ganar notoriedad y/o para pretender privilegios.
La usurpación de personalidad tiene propósitos encontrados, por un lado se pretende ser el que no se es y por el otro, ser el antagónico del protagónico, esto es, un conflicto de personalidad que se bate en el interior por envidia de tener o alcanzar aquello que el otro posee y a la vez (pretendiéndolo o sin pretenderlo) destruir aquello que anhela ser, pero que la rabia, la frustración y la razón no le permitirán jamás ser lo que quisiera ser ¿Será conflicto de personalidad, conflicto de intereses o estratagema del “webmaster”? ¿Será travestismo intelectual, plagio, piratería o clonación?

Aprender a ser
Y ya para concluir con éste vergonzoso episodio, sólo restaría preguntarnos ¿qué será más importante: ser, hacer, tener o pretender? ¿Qué cosa?... no se pierda el siguiente capítulo de su weblognovela “pereza mental me da saber… ¿quién es?”
… y a otra cosa mariposa ¿no? Vayamos a cosas importantes o al menos de palpitante actualidad; mismas que requieren ser abordadas, analizadas, criticadas, comentadas y reflexionadas. Me disculpo por abortar temas tan triviales, domésticos e intrascendentes. Esos temas se les dan bien a ustedes.
Las FARC
Todavía recuerdo cuando aquel embajador de Colombia en México (sexenio pasado), denunció ante los medios que en la UNAM había una oficina de la célula armada de las FARC. Y recuerdo como, ofendido el ex-rector de la UNAM, Dr. Juan Ramón de la Fuente, se rasgaba las vestiduras y se sentaba en silicio aludiendo injerencia y calumnias.
Yo he visto, soy testigo, que esas oficinas si las hay en la UNAM y en otras instancias bajo la protección o justificación inmoral de ser “autónomas”.
En Sudamérica, un incidente lamentable, aunque no me atrevería a decir que injustificable, como la violación del espacio y territorio vecino, se registró.
Es incontrovertible que el incidente se dio en un país hermano vecino, aunque quién sabe si amigo.
Por varios países de la zona, el presidente Rafael Correa del Ecuador ha denunciado el agravio y ha movilizado tropas, militarizando su frontera noreste.
Mucha alharaca y pocas razones se han esgrimido, porque todo mundo sabe que el actual presidente del Ecuador se quiere reelegir, ahora, so pretexto de la violación armada del territorio ecuatoriano.
Es incontrovertible y hasta cierto punto “injustificable” la transgresión; aunque el dignatario debiera, por ética, explicar que hacia en su territorio una de las células de las FARC, otrora movimiento de reivindicación social, actualmente capos de la droga, contrabandistas de armas, mercenarios y secuestradores; vulgares delincuentes, en una palabra.
¿Qué hacia en territorio ecuatoriano una célula terrorista de las FARC? ¿Qué hacían, tres mexicanos allí?
Esto es lo que debieran explicar el presidente Correa a su pueblo y al mundo; y el ex–rector de la Fuente a la comunidad universitaria y a México.
Y lejos de que el presidente Correa solicite una condena unánime mundial, aún y cuando sea justa, debiera ofrecer pruebas irrefutables de no tener relación ni interés alguno con las FARC; así como ofrecer de buena voluntad, su colaboración y solidaridad con el pueblo colombiano, quien a través de su presidente y de diversos funcionarios públicos del más alto nivel han ofrecido reiteradamente disculpas por la vía diplomática, ya el incidente registrado.
Oigan y al de Venezuela ¿quién lo llamó? ¿Quién Chávez? Que bueno que no se mete en asuntos que no le incumben. Lo que es cierto, que después de su derrota en el plebiscito por modificar la Constitución y hacerse de poderes inconmensurables (y de esa manera perpetuarse en el poder), desde entonces ha bajado su popularidad. Y el incidente le ha servido de escaparate-escándalo por un lado y por el otro, para tener la “justificación” de seguir impidiendo a Colombia el acceso al Golfo de Maracaibo, también conocido como Golfo de Coquivacoa o Golfo de Venezuela.
En lugar de sus bufonadas, alharacas y bravuconadas, debiera explicar al unísono con su homólogo del Ecuador, por qué se encontraron evidencias que los vinculan con las FARC. Debieran explicar a sus pueblos y al mundo sus vínculos e intereses; disculparse y deponer el poder que ostentan. Debieran tener un poquito de vergüenza mostrar congruencia.
Y para que no parezca que sólo se señala lo malo, es menester decir que países como Ecuador y Venezuela no tienen una deuda externa que comprometa sus recursos y bienes, ni que hipoteque el futuro de sus hijos. A diferencia de México que no nada más tiene hipotecado el futuro de nuestros hijos; sino que una enorme cantidad de connacionales sobreviven en condiciones inmorales e infrahumanas de miseria: en la pobreza extrema.

Y pues bien, hay muchos temas candentes en los medios que debieran merecer nuestra atención: El calentamiento global y sus evidentes repercusiones. La carrera presidencial en los EUA. El conflicto de israelitas vs palestinos. El aumento del 20% a los ingresos del personal del IFE. El caso Juan Camilo Muriño vs tráfico de influencias. El vergonzante tema del uso indebido de bienes y recursos del Estado de Tabasco por Fabiancito, el junior del gober precioso de Tabasco Andrés Granier Melo. El caso Álamo vs los “400 pueblos”. La animadversión que se ha ganado a pulso y tan pronto el munícipe de Tuxpan. Los casos sonados de impunidad en Tuxpan. Etc., etc., etc. Hay tantos y tantos temas por compartir y por abordar, como para que una weblognovela nos distraiga y nos ocupe tanto.
Saludos

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