Por Uriel Flores Aguayo
urielfloresaguayo@hotmail.com
De forma oportuna y repentina entró el gobernador de Veracruz al debate sobre el petróleo que ha generado la Iniciativa de Reforma Energética del Gobierno Federal. Para hacer oír su propuesta, al Licenciado Herrera Beltrán, mucho le ayudó su participación en la CONAGO y en los foros organizados por el Senado de la República. A nadie debe extrañar el que, desde Veracruz, se den opiniones y se hagan planteamientos sobre el tema, ya que se trata de un estado con muchas instalaciones petroleras y víctima de un sin fin de accidentes e irregularidades de parte de PEMEX; no olvidemos los atentados terroristas más recientes en las zonas de Cardel y Orizaba.
Poco se puede hablar de la propuesta del gobernador porque no se conoce, ya que le ha faltado presentarla en Veracruz después de hacerlo en el patio del Senado. Lo peor que puede pasar es que se apoye o se rechace desde diversos espacios de Veracruz sin que siquiera se conozca. No se sabe, por ejemplo, si el nombre de “Tercera vía” con el que se ha difundido corresponde a su verdadero nombre y a su concepción o si se trata de un título casual, de un hallazgo improvisado, para efectos mediáticos. A reserva de profundizar en la propuesta cuando la tenga en mis manos dudaría que estemos ante una opción radicalmente distinta a las dos opciones que polarizan el debate nacional al respecto: Privatización o Nacionalismo; más bien creo, si me atengo lo que circula en los medios, que es una idea adaptable al nuevo escenario de PEMEX, quede como quede. No la descartemos en principio, habrá que examinarla en su momento y someterla al filtro de las dos grandes visiones enfrentadas en la coyuntura nacional. La llamada tercera vía así como las propuestas de Calderón, del PRI y del Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo deben someterse a una consulta popular que tome en cuenta la opinión de los veracruzanos.
La cancelación por ahora del diálogo formal entre el Ejecutivo del Estado y los Legisladores Locales no debe impedir la organización del debate, para lo cual pueden ser promotores la U.V., los Tres Poderes, el I.E.V., los Municipios Petroleros y Sectores Sociales. Sería lamentable que la cancelación del encuentro aludido implicara la negativa total al debate; si así ocurriera, todo habría sido una cortina de humo y tanto el oficialismo como la oposición simplemente estarían simulando. Estridencias y fintas aparte, estamos ante una clara y exigible responsabilidad a todos los actores políticos. Si realmente se quiere debatir y convencer que se den los primeros pasos para articular foros plurales en todo el estado. Lo de menos es la paternidad de la convocatoria; ojalá no esperen una ocupación de tribuna como se hizo a nivel federal para lograr el debate; claro que es preferible, por auténtica, una acción de esa naturaleza a los ridículos y desgastados abandonos de los salones de plenos.
En estos días con el tema de la tercera vía y la presencia del ejecutivo en el Palacio Legislativo más claro ha quedado que la política en Veracruz pasa por un mal momento de unanimidades y que la oposición brilla por su ausencia y se enfila a los callejones de la confusión o el “palerismo”. Dicho sea de paso, recordando a los clásicos, toda unanimidad es sospechosa.
Signifique lo que sea la tercera vía ya lo sabremos cuando se nos presente a los veracruzanos, finalmente la clave radica en observar si tiene o no implicaciones privatizadoras. Puede ser el número de vía que se quiera siempre y cuando no privatice. Si la idea es que los estados de la República, como Veracruz, donde se realizan actividades petroleras y se padece la ineficiencia de PEMEX, se asocien con esa empresa para realizar algunas actividades pues es algo que desde una perspectiva federal se debe explorar. Ahora que está de moda decirlo hay que elevar un ¡Ya basta! al centralismo pretencioso y explotador.
De forma oportuna y repentina entró el gobernador de Veracruz al debate sobre el petróleo que ha generado la Iniciativa de Reforma Energética del Gobierno Federal. Para hacer oír su propuesta, al Licenciado Herrera Beltrán, mucho le ayudó su participación en la CONAGO y en los foros organizados por el Senado de la República. A nadie debe extrañar el que, desde Veracruz, se den opiniones y se hagan planteamientos sobre el tema, ya que se trata de un estado con muchas instalaciones petroleras y víctima de un sin fin de accidentes e irregularidades de parte de PEMEX; no olvidemos los atentados terroristas más recientes en las zonas de Cardel y Orizaba.
Poco se puede hablar de la propuesta del gobernador porque no se conoce, ya que le ha faltado presentarla en Veracruz después de hacerlo en el patio del Senado. Lo peor que puede pasar es que se apoye o se rechace desde diversos espacios de Veracruz sin que siquiera se conozca. No se sabe, por ejemplo, si el nombre de “Tercera vía” con el que se ha difundido corresponde a su verdadero nombre y a su concepción o si se trata de un título casual, de un hallazgo improvisado, para efectos mediáticos. A reserva de profundizar en la propuesta cuando la tenga en mis manos dudaría que estemos ante una opción radicalmente distinta a las dos opciones que polarizan el debate nacional al respecto: Privatización o Nacionalismo; más bien creo, si me atengo lo que circula en los medios, que es una idea adaptable al nuevo escenario de PEMEX, quede como quede. No la descartemos en principio, habrá que examinarla en su momento y someterla al filtro de las dos grandes visiones enfrentadas en la coyuntura nacional. La llamada tercera vía así como las propuestas de Calderón, del PRI y del Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo deben someterse a una consulta popular que tome en cuenta la opinión de los veracruzanos.
La cancelación por ahora del diálogo formal entre el Ejecutivo del Estado y los Legisladores Locales no debe impedir la organización del debate, para lo cual pueden ser promotores la U.V., los Tres Poderes, el I.E.V., los Municipios Petroleros y Sectores Sociales. Sería lamentable que la cancelación del encuentro aludido implicara la negativa total al debate; si así ocurriera, todo habría sido una cortina de humo y tanto el oficialismo como la oposición simplemente estarían simulando. Estridencias y fintas aparte, estamos ante una clara y exigible responsabilidad a todos los actores políticos. Si realmente se quiere debatir y convencer que se den los primeros pasos para articular foros plurales en todo el estado. Lo de menos es la paternidad de la convocatoria; ojalá no esperen una ocupación de tribuna como se hizo a nivel federal para lograr el debate; claro que es preferible, por auténtica, una acción de esa naturaleza a los ridículos y desgastados abandonos de los salones de plenos.
En estos días con el tema de la tercera vía y la presencia del ejecutivo en el Palacio Legislativo más claro ha quedado que la política en Veracruz pasa por un mal momento de unanimidades y que la oposición brilla por su ausencia y se enfila a los callejones de la confusión o el “palerismo”. Dicho sea de paso, recordando a los clásicos, toda unanimidad es sospechosa.
Signifique lo que sea la tercera vía ya lo sabremos cuando se nos presente a los veracruzanos, finalmente la clave radica en observar si tiene o no implicaciones privatizadoras. Puede ser el número de vía que se quiera siempre y cuando no privatice. Si la idea es que los estados de la República, como Veracruz, donde se realizan actividades petroleras y se padece la ineficiencia de PEMEX, se asocien con esa empresa para realizar algunas actividades pues es algo que desde una perspectiva federal se debe explorar. Ahora que está de moda decirlo hay que elevar un ¡Ya basta! al centralismo pretencioso y explotador.
No hay comentarios:
Publicar un comentario