lunes, 18 de julio de 2011

Coyuntura Política XXI


Raúl Abraham López Martínez*

¿Qué es la libertad?

La libertad es un concepto que se ha discutido en distintos momentos históricos y en distintas culturas, es un concepto tan amplio como el propio desarrollo de la humanidad. Para los griegos la libertad se encontraba contextualizada en una sociedad dividida entre los “ciudadanos” y los esclavos. Para ser un ciudadano en la antigua Grecia o en la antigua Roma, se requería cumplir ciertas condiciones. Una de ellas era ser parte del grupo original que fundaron esas Ciudades-Estado. También era necesario cumplir con un status económico, ya que no era suficiente con ser parte del grupo fundacional, sino también era necesario poseer tierras, esclavos, y dinero. Cumplidas estas dos cualidades, se podía adquirir el reconocimiento de “ciudadano” y gozar de todos los derechos y obligaciones que esto conlleva. Iniciando por la libertad de opinar en las asambleas, la libertad de elegir a sus autoridades, la libertad de poder postularse a algún cargo.
Dentro de este ejemplo podemos valorar el concepto de libertad dentro de un ángulo histórico y relativo.
Otro ejemplo lo podemos encontrar en la revolución francesa, en donde un conjunto de hombres y mujeres, se atrevieron a cuestionar el orden establecido basado en la monarquía, en una sociedad organizada en estamentos, para crear un nuevo orden social y político. Sintetizándose este nuevo orden en las palabras: Libertad, Igualdad y Fraternidad.
Es precisamente en nombre de la libertad en que se promovieron las guerras de independencia en el siglo XIX, igualmente en nombre de la libertad se levantaron pueblos enteros en el siglo XX para enarbolar las revoluciones. Desde la Revolución Mexicana de 1910, la revolución Rusa de 1917, las revoluciones en Asia, China, América Latina y en África.
La idea de libertad siempre connota movimiento, acción, posibilidades alternas, otra forma de hacer las cosas, la libertad como concepto y acción, puede ser enarbolada por un grupo, una clase, una sociedad, un gobierno, es decir por una colectividad, pero también la libertad puede ser invocada de manera individual.
Los filósofos son un buen ejemplo de acción de la libertad individual, son precisamente los filósofos desde Platón (antes de Cristo) hasta Noam Chomsky en la actualidad, quienes haciendo uso de sus capacidades intelectuales han hecho de la libertad un referente de crítica política, social, ética y moral, de las sociedades de su tiempo.
Como podemos ver, el concepto de libertad es muy amplio y profundo, independientemente de esta complejidad, considero que una condición fundamental para que se pueda presentar la libertad, es el no encontrarse inmerso en un contexto de vida o muerte, es decir, de que el uso de nuestra libertad no conlleve la perdida de nuestra vida por distintos motivos. Cuando se presenta esta situación, la libertad carece de sentido práctico.
Resumiendo: La libertad es ejercer nuestra capacidad de elegir la respuesta que consideremos que es lo mejor en un momento dado, ya sea en un nivel individual o colectivo. Sin embargo, para que la libertad pueda tener una continuidad en nuestras vidas, es necesario acompañarla del sentido práctico de definir el para qué queremos la libertad, en qué nos va a beneficiar personalmente, familiarmente, como comunidad, como parte de un ser inserto en sociedad.
El responder estas preguntas nos va a permitir valorar nuestra libertad al igual que garantizar nuestras condiciones de vida, de esta forma estaremos en condiciones de aspirar a una libertad con sentido de futuro.
*Director de la Revista Digital Independiente Voz Universitaria www.vozuniversitaria.org.mx

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