Por Orlando Segura Hervert…
Las tribus y hordas del Partido de la Revolución Democrática no se pusieron de acuerdo y reventaron el proceso de elecciones internas para elegir a sus consejeros nacionales, por enésima ocasión fracasaron en su intento por llevar a cabo un ejercicio tan simple como definir el padrón electoral, colocar urnas, definir los puntos de colocación de las casillas y finalmente llamar a votar a sus adeptos, militantes y simpatizantes.
Sin embargo, la elección convocada para este domingo 23 de octubre, se la llevó el carajo en 10 entidades de la república mexicana, entre ellos el estado de Veracruz, por una sencilla situación, alguien colocó 100 sujetos en el lugar en el que se había determinado para que trabajase y despachase el Servicio Nacional Electoral, desde ahí partiría la paquetería electoral y esto no pudo llevarse a cabo por la confrontación y la posición de la fuerza de determinados intereses.
Hay expresiones y corrientes en el sol azteca que les conviene mantener a dicho organización partidaria mas enana de lo que lo han dejado los procesos electorales constitucionales, tales personajes generalmente son cooptados por otras fuerzas políticas e inclusive por gobiernos estatales o federales, y en este contexto, aunque teóricamente son perredistas, en la práctica no responde ni a la ideología, ni a la política del instituto de izquierda supuestamente con mayor poder de convocatoria, en los hechos se alejaron de las demandas sociales, de ahí la explicación de los descalabros sufridos en el 2009.
Se han dado casos como el de Carlos Mexhua, quien fue grabado en You Tube, prometiendo dádivas, al lado de dicho dirigente se observa al secretario de protección civil del Distrito Federal, Elías Miguel Moreno Brizuela, ello es una prueba de la manipulación y compra de conciencias que se hace desde los puestos públicos.
Indudablemente la suspensión de elecciones y sobre todo las causas, serán valoradas por un segmento del electorado, éste hecho impactará en las preferencias, desprestigiando aún más a los chuchos (Jesús Ortega Martínez).
En Tuxpan, estos ejemplos bochornosos del presente y del pasado (robo de urnas…), perjudicaron el desempeño del PRD, tan es así que desde el 2000, ningún espacio edilicio ha podido conquistar el perderé, de eso ya van 11 años sin penas, ni glorias…
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