Tuxpan, Ver…Las señoras observaron el escenario y dijeron: “mira estos priistas, trajeron a Peña Nieto a Tuxpan”, lo real es que solo estaban los encargados de logística, haciendo campaña a favor del exgobernador del Estado de México, saludaban al público asistente, entregaban playeras y otros artículos a los bañistas y a quienes manifestaban cierto apoyo hacia Enrique.
El sol se presentó en su apogeo y la gente paulatinamente acudió a este lugar y atractivo turístico, y ahí, en la entrada de la playa, varios promotores del aspirante a la presidencia de la república mexicana, Enrique Peña Nieto, se desgañitaban por el candidato del Revolucionario Institucional.
Las edecanes sonreían y los jóvenes intentaban adhesiones. Así, los priistas aprovecharon el período vacacional, tratando de conquistar a infinidad de simpatizantes, difundiendo la propuesta, los compromisos de quien abandera los colores del tricolor.
Se supo por parte de los coordinadores de campaña que el personaje en cuestión, si bien no se encontraba en tierras porteñas, si andaba sumergiéndose en las costas veracruzanas, en el puerto jarocho, acompañado de su esposa, Angélica Rivera, la artista y famosa Gaviota.
Las multitudes avanzaban, solo escuchaban al animador durante unos minutos y se enfilaban hacia la parte sustancial del período vacacional, disfrutar la arena, el soy y el mar, fue lo principal.
El sol se presentó en su apogeo y la gente paulatinamente acudió a este lugar y atractivo turístico, y ahí, en la entrada de la playa, varios promotores del aspirante a la presidencia de la república mexicana, Enrique Peña Nieto, se desgañitaban por el candidato del Revolucionario Institucional.
Las edecanes sonreían y los jóvenes intentaban adhesiones. Así, los priistas aprovecharon el período vacacional, tratando de conquistar a infinidad de simpatizantes, difundiendo la propuesta, los compromisos de quien abandera los colores del tricolor.
Se supo por parte de los coordinadores de campaña que el personaje en cuestión, si bien no se encontraba en tierras porteñas, si andaba sumergiéndose en las costas veracruzanas, en el puerto jarocho, acompañado de su esposa, Angélica Rivera, la artista y famosa Gaviota.
Las multitudes avanzaban, solo escuchaban al animador durante unos minutos y se enfilaban hacia la parte sustancial del período vacacional, disfrutar la arena, el soy y el mar, fue lo principal.
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