Luis Velázquez
La reforma laboral terminó por enfrentar al senador Emilio Gamboa Patrón y al diputado federal, Manlio Fabio Beltrones.
Pero ambos, dice el senador perredista, ex jefe de Gobierno capitalino, Alejandro Encinas, se están peleando por ganarse la confianza del presidente electo, Enrique Peña Nieto, como el interlocutor número uno en el Congreso de la Unión.
Y el choque de trenes, ni hablar, en caso de ahondarse, llegará a Veracruz.
Por el lado de Gamboa Patrón, con el secretario de Educación, Adolfo Mota Hernández, aspirante a gobernar Veracruz en el año 2016 y por el lado de Beltrones, con el senador Héctor Yunes Landa, quien anda ya en abierta precampaña.
En ambos casos pudiera reproducirse la historia de Morris West, contada en la novela “Arlequín”, donde dos jefes disputan la hegemonía del poder empresarial y terminan matándose entre sí, luego que sus familias han sido ejecutadas. Al último, el ganador es el tercero en discordia.
La diferencia entre Gamboa Patrón y Beltrones inicia a partir de que el Senado rechazó la reforma laboral aprobada por la Cámara de Diputados.
Entonces, se dijo que en la Cámara Baja había sido negociada de la siguiente manera: la bancada priista aprobada la iniciativa de Felipe Calderón con, por ejemplo: el pago de salarios por hora y el outsoursing y la bancada panista dejaba sin efecto la rendición de cuentas y la transparencia de los dirigentes sindicales.
Pero en el Senado los hechos y las circunstancias cambiaron, el PAN y los partidos de izquierda se unieron, renegociaron el clausulado y la regresaron a la Cámara Baja.
Entonces, Gamboa Patrón cometió la pifia de anunciar que Peña Nieto enviaría su iniciativa de reforma laboral apenas llegara a Los Pinos y luego enseguida Beltrones aclaró que estaba equivocado.
Luego, incluso, que el coordinador del equipo de transición para la reforma laboral, Alfonso Navarrete Prida, hablara con los dos y dejara en claro que “el interés de Peña Nieto era aprobar y publicar la iniciativa de Felipe Calderón”.
Según el semanario Proceso 1879, “el reacomodo de posiciones dejó mal parado a Beltrones y, sobre todo, a Gamboa Patrón”, a quien le llovió duro y tupido.
Así las partes llegaron a un acuerdo para evitar que la reforma electoral de Calderón se enfriara en San Lázaro y se apruebe antes del fin de sexenio, que llegará el día 30.
DISPUTA PATRÓN-BELTRONES LLEGA A VERACRUZ
La pugna de Gamboa Patrón y Beltrones por la confianza de Peña Nieto es vieja.
Por ejemplo: en la víspera que el exgobernador del estado de México oficializara la candidatura presidencial, Peña Nieto dijo a Gamboa Patrón: “me han dicho que eres amigo de Beltrones”.
La respuesta de Gamboa Patrón fue la siguiente: “no es mi amigo, es mi hermano, pero ninguna duda tengo que tú eres el político que este país necesita”.
Y, bueno, ninguna duda hay de que Gamboa Patrón está más cerca del presidente electo que Beltrones.
Y más porque Beltrones buscó la candidatura presidencial y, aun cuando es leal de manera institucional a Peña Nieto, tiene su corazón y su juego político en la Cámara Baja para desde ahí convertirse en una parcela poderosa como cuando en el sexenio de Felipe Calderón lo fuera desde el Senado.
En el año 2010, a Beltrones le faltó fuerza política en el interior del PRI para abrir camino a su discípulo, el senador Héctor Yunes Landa, a la candidatura a gobernador de Veracruz.
En su momento, Adolfo Mota también buscaría la candidatura a gobernador tanto en el año 2004, con Miguel Alemán Velasco en el trono imperial, como en el 2010 con Fidel Herrera Beltrán en el mando.
Y en las dos fechas, Mota Hernández apechugó las circunstancias y, bueno, se ha mantenido.
Incluso, la fuerza política de Gamboa Patrón permitió que Mota fuera ratificado en su cargo como secretario de Educación, luego del abucheo a JD en el Teatro del Estado en un concierto que estuvo coordinado por Mota y Harry Grappa, entonces secretario particular del ejecutivo.
Ahora, Beltrones y Gamboa Patrón pelean por arraigarse en las neuronas, el corazón y el hígado de Peña Nieto, tanto para fortalecerse ellos mismos y, por añadidura, para mover sus fichas de cara a las elecciones futuras, 14 en el año 2013.
Y tal disputa, sin duda, llegará a Veracruz en el 2016.
EN DISPUTA SILLA DE JD
Así, la contienda por la silla de JD desde ahora se ha encendido.
Uno: el candidato de Beltrones es el senador Héctor Yunes Landa.
Dos: el candidato de Gamboa Patrón es Adolfo Mota.
Tres: el candidato de Luis Videgaray, el político más cercano a Peña Nieto, es el senador José Yunes Zorrilla.
Cuatro: los candidatos de JD son, por ahora, los alcaldes Salvador Manzur y Alberto Silva.
Y hay quienes, de igual manera, hablan que Pepe Yunes ha entrado al corazón privilegiado de JD para el 2016.
La candidatura priista en el 2016 se está cocinando… Quizá ya está definida, por ahora. Mañana, las circunstancias pueden cambiar.
POSDATA: Más información en elblog.expediente.mx
La reforma laboral terminó por enfrentar al senador Emilio Gamboa Patrón y al diputado federal, Manlio Fabio Beltrones.
Pero ambos, dice el senador perredista, ex jefe de Gobierno capitalino, Alejandro Encinas, se están peleando por ganarse la confianza del presidente electo, Enrique Peña Nieto, como el interlocutor número uno en el Congreso de la Unión.
Y el choque de trenes, ni hablar, en caso de ahondarse, llegará a Veracruz.
Por el lado de Gamboa Patrón, con el secretario de Educación, Adolfo Mota Hernández, aspirante a gobernar Veracruz en el año 2016 y por el lado de Beltrones, con el senador Héctor Yunes Landa, quien anda ya en abierta precampaña.
En ambos casos pudiera reproducirse la historia de Morris West, contada en la novela “Arlequín”, donde dos jefes disputan la hegemonía del poder empresarial y terminan matándose entre sí, luego que sus familias han sido ejecutadas. Al último, el ganador es el tercero en discordia.
La diferencia entre Gamboa Patrón y Beltrones inicia a partir de que el Senado rechazó la reforma laboral aprobada por la Cámara de Diputados.
Entonces, se dijo que en la Cámara Baja había sido negociada de la siguiente manera: la bancada priista aprobada la iniciativa de Felipe Calderón con, por ejemplo: el pago de salarios por hora y el outsoursing y la bancada panista dejaba sin efecto la rendición de cuentas y la transparencia de los dirigentes sindicales.
Pero en el Senado los hechos y las circunstancias cambiaron, el PAN y los partidos de izquierda se unieron, renegociaron el clausulado y la regresaron a la Cámara Baja.
Entonces, Gamboa Patrón cometió la pifia de anunciar que Peña Nieto enviaría su iniciativa de reforma laboral apenas llegara a Los Pinos y luego enseguida Beltrones aclaró que estaba equivocado.
Luego, incluso, que el coordinador del equipo de transición para la reforma laboral, Alfonso Navarrete Prida, hablara con los dos y dejara en claro que “el interés de Peña Nieto era aprobar y publicar la iniciativa de Felipe Calderón”.
Según el semanario Proceso 1879, “el reacomodo de posiciones dejó mal parado a Beltrones y, sobre todo, a Gamboa Patrón”, a quien le llovió duro y tupido.
Así las partes llegaron a un acuerdo para evitar que la reforma electoral de Calderón se enfriara en San Lázaro y se apruebe antes del fin de sexenio, que llegará el día 30.
DISPUTA PATRÓN-BELTRONES LLEGA A VERACRUZ
La pugna de Gamboa Patrón y Beltrones por la confianza de Peña Nieto es vieja.
Por ejemplo: en la víspera que el exgobernador del estado de México oficializara la candidatura presidencial, Peña Nieto dijo a Gamboa Patrón: “me han dicho que eres amigo de Beltrones”.
La respuesta de Gamboa Patrón fue la siguiente: “no es mi amigo, es mi hermano, pero ninguna duda tengo que tú eres el político que este país necesita”.
Y, bueno, ninguna duda hay de que Gamboa Patrón está más cerca del presidente electo que Beltrones.
Y más porque Beltrones buscó la candidatura presidencial y, aun cuando es leal de manera institucional a Peña Nieto, tiene su corazón y su juego político en la Cámara Baja para desde ahí convertirse en una parcela poderosa como cuando en el sexenio de Felipe Calderón lo fuera desde el Senado.
En el año 2010, a Beltrones le faltó fuerza política en el interior del PRI para abrir camino a su discípulo, el senador Héctor Yunes Landa, a la candidatura a gobernador de Veracruz.
En su momento, Adolfo Mota también buscaría la candidatura a gobernador tanto en el año 2004, con Miguel Alemán Velasco en el trono imperial, como en el 2010 con Fidel Herrera Beltrán en el mando.
Y en las dos fechas, Mota Hernández apechugó las circunstancias y, bueno, se ha mantenido.
Incluso, la fuerza política de Gamboa Patrón permitió que Mota fuera ratificado en su cargo como secretario de Educación, luego del abucheo a JD en el Teatro del Estado en un concierto que estuvo coordinado por Mota y Harry Grappa, entonces secretario particular del ejecutivo.
Ahora, Beltrones y Gamboa Patrón pelean por arraigarse en las neuronas, el corazón y el hígado de Peña Nieto, tanto para fortalecerse ellos mismos y, por añadidura, para mover sus fichas de cara a las elecciones futuras, 14 en el año 2013.
Y tal disputa, sin duda, llegará a Veracruz en el 2016.
EN DISPUTA SILLA DE JD
Así, la contienda por la silla de JD desde ahora se ha encendido.
Uno: el candidato de Beltrones es el senador Héctor Yunes Landa.
Dos: el candidato de Gamboa Patrón es Adolfo Mota.
Tres: el candidato de Luis Videgaray, el político más cercano a Peña Nieto, es el senador José Yunes Zorrilla.
Cuatro: los candidatos de JD son, por ahora, los alcaldes Salvador Manzur y Alberto Silva.
Y hay quienes, de igual manera, hablan que Pepe Yunes ha entrado al corazón privilegiado de JD para el 2016.
La candidatura priista en el 2016 se está cocinando… Quizá ya está definida, por ahora. Mañana, las circunstancias pueden cambiar.
POSDATA: Más información en elblog.expediente.mx
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