Luis Velázquez
Mientras algunos diputados federales de Veracruz han faltado a las sesiones parlamentarias, de acuerdo con la página web de la Cámara Alta los tres senadores jarochos han asistido de manera puntual.
Los tres Yunes, José, Héctor y Fernando, presidentes, a su vez, de las Comisiones de Hacienda (la más importante), Protección Civil y la Defensa Nacional, han cumplido, hasta ahora, con su chamba.
Y por tanto, han desquitado desde ahí el salario.
El senador Héctor Yunes, por ejemplo, acaba de viajar a San Salvador y Fernando Yunes estuvo en Alemania, digamos, en misiones oficiales.
Pero en tiempo y forma han registrado asistencia en las sesiones de la Cámara Alta, más ahora cuando se debatirá, una vez más, la reforma laboral y se alistan para debatir el presupuesto federal para el año entrante.
Más aún si se considera que apenas hace unas semanas tomaron posesión y estamos en el nadir de un sexenio y el retorno del PRI a Los Pinos a través del presidente electo, Enrique Peña Nieto.
El hecho toma una dimensión amplia a partir de que unos diputados federales han faltado en los primeros meses a las sesiones, entre ellos:
Ricardo Aldana (en octubre dos inasistencias y una en la única sesión de noviembre).
Alma Jeanny Arroyo Ruiz (una inasistencia en noviembre).
Joaquín Caballero Rosiñol (una inasistencia en octubre).
Verónica Carreón Cervantes (dos inasistencias durante septiembre y octubre)
Jorge Del Ángel Acosta (una inasistencia con permiso de la mesa directiva en septiembre)
Juan Manuel Diez Francos (asistencia por cédula en octubre)
Gaudencio Hernández Burgos (una inasistencia en octubre)
Noé Hernández González (una inasistencia con permiso de la mesa directiva en septiembre y una inasistencia en octubre)
Tomás López Landero (una inasistencia en octubre)
José Alejandro Montano Guzmán (en septiembre dos asistencias por cédula).
Zita Beatriz Pazzi Maza (una inasistencia con permiso de mesa directiva en septiembr
Leopoldo Sánchez Cruz (una inasistencia en octubre y una en noviembre, en la única del mes).
Ponciano Vázquez Parissi (tres asistencias por cédula y una inasistencia en octubre).
Regina Vázquez Saut (una inasistencia en octubre y una en noviembre).
Juan Bueno Torio (tres inasistencia con permiso de mesa directiva en septiembre y en octubre una asistencia por cédula).
Mariana Dunyaska García Rojas (una inasistencia con permiso de mesa directiva y cinco inasistencias en octubre; la diputada más faltista).
Víctor Serralde Martínez (dos inasistencias, una con permiso de mesa directiva; otra, justificada en septiembre; en octubre tres inasistencias, una, justificada).
Yazmín de los Ángeles Copete Zapot (una inasistencia por votación en septiembre).
Uriel Flores Aguayo (dos inasistencias por votación en septiembre).
José Antonio León Mendívil (una inasistencia por votaciones en octubre).
María Guadalupe Moctezuma Oviedo (en septiembre, tres inasistencias, dos con permiso de mesa directiva y una por votaciones).
Federico José González Luna Bueno (una inasistencia con permiso de mesa directiva y dos asistencias por cédula en septiembre; en octubre, una asistencia).
Araceli Torres Flores (una asistencia por cédula en septiembre).
Según consta en la página web del Congreso de la Unión.
Lo peor del asunto es que conforme transcurren las semanas y los meses y las partes van tomando confianza, de pronto, la mayor parte llega a faltar, quitados de la pena, pues el único castigo consiste en descontarles el día correspondiente, y que, claro, luego retribuyen con otros ingresos, digamos, viáticos.
Incluso, hasta operaciones quirúrgicas inventadas.
Pero, bueno, los tres senadores de Veracruz han obtenido un diez de calificación en la asistencia puntual a clase y solo falta evaluar el trabajo legislativo en los dos meses y medio que llevan como legisladores para ver si están cumpliendo con el resto de la tarea.
UNA LUCHA DE HONOR
Nadie dudaría que el trío de Yunes senadores han sido puntuales en las sesiones porque saben, están conscientes que así construyen su posible candidatura a la gubernatura de Veracruz en el año 2016.
Primero: porque la Cámara de Senadores ha sido la antesala del paso siguiente como quedó constancia, por ejemplo, con Fidel Herrera Beltrán, Miguel Alemán Velazco y Rafael Murillo Vidal. Incluso, Rafael Hernández Ochoa, que de diputado federal pasó a la gubernatura.
Segundo: porque los tres Yunes han llegado al Senado con poderosos padrinos: José, condiscípulo universitario de Luis Videgaray, el político más cercano a Enrique Peña Nieto, y Ernesto Cordero, jefe de la bancada panista en la Cámara Alta.
Héctor, discípulo de Manlio Fabio Beltrones, a quien sólo falta despachar en Los Pinos para cerrar su biografía política.
Fernando, hijo del polémico y controvertido Miguel Ángel Yunes Linares, amigo del panista Ernesto Cordero y de los priistas Manlio Fabio Beltrones, Jesús Murillo Karam, Miguel Ángel Osorio Chong y Emilio Gamboa Patrón (quizá por aquello de Lydia Cacho).
Y en tal virtud, estamos ante palabras mayores en la política nacional y local.
Tercero: porque el trío de Yunes en el Senado son jóvenes, parte de un país con más del 50 por ciento de la población joven. El gobernador electo de Chiapas, por ejemplo, tiene 32 años, por tanto, se ubican en la preferencia nacional.
Cuarto: porque los dos Yunes priistas traen atravesada la flecha cuando en el 2010 quedaron en la recta final de la candidatura a gobernador, en tanto el Yunes panista tiene en su padre a un político que ha buscado la gubernatura en tres ocasiones y ha perdido.
La silla embrujada de palacio se considera así, en la mirada de los tres Yunes senadores, una lucha de honor.
Cinco: los tres Yunes senadores son candidatos naturales, quizá al día de hoy con más posibilidades que los otros aspirantes, entre ellos: Alberto Silva y Salvador Manzur, alcaldes de Tuxpan y Boca del Río, y cuyo reto está en crecer en materia política y electoral de aquí al año 2016.
Por eso se explicaría que los tres Yunes senadores han sido puntuales en las sesiones parlamentarias, pues el trío se empeña en construir amigos y lealtades y posicionarse camino a la sucesión en tierra jarocha.
COMISIONES DE CADA YUNES
Falta ahora conocer la estrategia política con que se están moviendo y operando.
Y, bueno, desde la Comisión de Hacienda José Yunes Zorrilla tendría más opciones, además del presupuesto federal de cada año, de caminar recursos para Veracruz y el resto del país y también para favorecer la reforma fiscal, un gran pendiente desde sexenios anteriores.
Héctor Yunes Landa ocupa la presidencia de la Comisión de Protección Civil, de entrada, con un bajo perfil para operar.
El FONDEN, tan debatido en el sexenio de Felipe Calderón y Vicente Fox como instrumento de negociación política, bien pudiera servir para hacer escándalo y bajar los recursos a las entidades federativas, entre ellas, Veracruz, y a la que le han sido tan retenidos, y quizá ordeñados.
Fernando Yunes es presidente de la Comisión de la Defensa Nacional desde donde podrá crecer lo suficiente, si se considera que Peña Nieto ha reiterado que el ejército y la marina continuarán en el país en la sórdida lucha contra los carteles.
Pero más aún porque ha llegado la hora, con el PRI en Los Pinos, de revisar el saldo de la llamada narcoguerra, con más de 60 mil muertos en el sexenio felipista.
POSDATA: Más información en el blog.expediente.mx
Mientras algunos diputados federales de Veracruz han faltado a las sesiones parlamentarias, de acuerdo con la página web de la Cámara Alta los tres senadores jarochos han asistido de manera puntual.
Los tres Yunes, José, Héctor y Fernando, presidentes, a su vez, de las Comisiones de Hacienda (la más importante), Protección Civil y la Defensa Nacional, han cumplido, hasta ahora, con su chamba.
Y por tanto, han desquitado desde ahí el salario.
El senador Héctor Yunes, por ejemplo, acaba de viajar a San Salvador y Fernando Yunes estuvo en Alemania, digamos, en misiones oficiales.
Pero en tiempo y forma han registrado asistencia en las sesiones de la Cámara Alta, más ahora cuando se debatirá, una vez más, la reforma laboral y se alistan para debatir el presupuesto federal para el año entrante.
Más aún si se considera que apenas hace unas semanas tomaron posesión y estamos en el nadir de un sexenio y el retorno del PRI a Los Pinos a través del presidente electo, Enrique Peña Nieto.
El hecho toma una dimensión amplia a partir de que unos diputados federales han faltado en los primeros meses a las sesiones, entre ellos:
Ricardo Aldana (en octubre dos inasistencias y una en la única sesión de noviembre).
Alma Jeanny Arroyo Ruiz (una inasistencia en noviembre).
Joaquín Caballero Rosiñol (una inasistencia en octubre).
Verónica Carreón Cervantes (dos inasistencias durante septiembre y octubre)
Jorge Del Ángel Acosta (una inasistencia con permiso de la mesa directiva en septiembre)
Juan Manuel Diez Francos (asistencia por cédula en octubre)
Gaudencio Hernández Burgos (una inasistencia en octubre)
Noé Hernández González (una inasistencia con permiso de la mesa directiva en septiembre y una inasistencia en octubre)
Tomás López Landero (una inasistencia en octubre)
José Alejandro Montano Guzmán (en septiembre dos asistencias por cédula).
Zita Beatriz Pazzi Maza (una inasistencia con permiso de mesa directiva en septiembr
Leopoldo Sánchez Cruz (una inasistencia en octubre y una en noviembre, en la única del mes).
Ponciano Vázquez Parissi (tres asistencias por cédula y una inasistencia en octubre).
Regina Vázquez Saut (una inasistencia en octubre y una en noviembre).
Juan Bueno Torio (tres inasistencia con permiso de mesa directiva en septiembre y en octubre una asistencia por cédula).
Mariana Dunyaska García Rojas (una inasistencia con permiso de mesa directiva y cinco inasistencias en octubre; la diputada más faltista).
Víctor Serralde Martínez (dos inasistencias, una con permiso de mesa directiva; otra, justificada en septiembre; en octubre tres inasistencias, una, justificada).
Yazmín de los Ángeles Copete Zapot (una inasistencia por votación en septiembre).
Uriel Flores Aguayo (dos inasistencias por votación en septiembre).
José Antonio León Mendívil (una inasistencia por votaciones en octubre).
María Guadalupe Moctezuma Oviedo (en septiembre, tres inasistencias, dos con permiso de mesa directiva y una por votaciones).
Federico José González Luna Bueno (una inasistencia con permiso de mesa directiva y dos asistencias por cédula en septiembre; en octubre, una asistencia).
Araceli Torres Flores (una asistencia por cédula en septiembre).
Según consta en la página web del Congreso de la Unión.
Lo peor del asunto es que conforme transcurren las semanas y los meses y las partes van tomando confianza, de pronto, la mayor parte llega a faltar, quitados de la pena, pues el único castigo consiste en descontarles el día correspondiente, y que, claro, luego retribuyen con otros ingresos, digamos, viáticos.
Incluso, hasta operaciones quirúrgicas inventadas.
Pero, bueno, los tres senadores de Veracruz han obtenido un diez de calificación en la asistencia puntual a clase y solo falta evaluar el trabajo legislativo en los dos meses y medio que llevan como legisladores para ver si están cumpliendo con el resto de la tarea.
UNA LUCHA DE HONOR
Nadie dudaría que el trío de Yunes senadores han sido puntuales en las sesiones porque saben, están conscientes que así construyen su posible candidatura a la gubernatura de Veracruz en el año 2016.
Primero: porque la Cámara de Senadores ha sido la antesala del paso siguiente como quedó constancia, por ejemplo, con Fidel Herrera Beltrán, Miguel Alemán Velazco y Rafael Murillo Vidal. Incluso, Rafael Hernández Ochoa, que de diputado federal pasó a la gubernatura.
Segundo: porque los tres Yunes han llegado al Senado con poderosos padrinos: José, condiscípulo universitario de Luis Videgaray, el político más cercano a Enrique Peña Nieto, y Ernesto Cordero, jefe de la bancada panista en la Cámara Alta.
Héctor, discípulo de Manlio Fabio Beltrones, a quien sólo falta despachar en Los Pinos para cerrar su biografía política.
Fernando, hijo del polémico y controvertido Miguel Ángel Yunes Linares, amigo del panista Ernesto Cordero y de los priistas Manlio Fabio Beltrones, Jesús Murillo Karam, Miguel Ángel Osorio Chong y Emilio Gamboa Patrón (quizá por aquello de Lydia Cacho).
Y en tal virtud, estamos ante palabras mayores en la política nacional y local.
Tercero: porque el trío de Yunes en el Senado son jóvenes, parte de un país con más del 50 por ciento de la población joven. El gobernador electo de Chiapas, por ejemplo, tiene 32 años, por tanto, se ubican en la preferencia nacional.
Cuarto: porque los dos Yunes priistas traen atravesada la flecha cuando en el 2010 quedaron en la recta final de la candidatura a gobernador, en tanto el Yunes panista tiene en su padre a un político que ha buscado la gubernatura en tres ocasiones y ha perdido.
La silla embrujada de palacio se considera así, en la mirada de los tres Yunes senadores, una lucha de honor.
Cinco: los tres Yunes senadores son candidatos naturales, quizá al día de hoy con más posibilidades que los otros aspirantes, entre ellos: Alberto Silva y Salvador Manzur, alcaldes de Tuxpan y Boca del Río, y cuyo reto está en crecer en materia política y electoral de aquí al año 2016.
Por eso se explicaría que los tres Yunes senadores han sido puntuales en las sesiones parlamentarias, pues el trío se empeña en construir amigos y lealtades y posicionarse camino a la sucesión en tierra jarocha.
COMISIONES DE CADA YUNES
Falta ahora conocer la estrategia política con que se están moviendo y operando.
Y, bueno, desde la Comisión de Hacienda José Yunes Zorrilla tendría más opciones, además del presupuesto federal de cada año, de caminar recursos para Veracruz y el resto del país y también para favorecer la reforma fiscal, un gran pendiente desde sexenios anteriores.
Héctor Yunes Landa ocupa la presidencia de la Comisión de Protección Civil, de entrada, con un bajo perfil para operar.
El FONDEN, tan debatido en el sexenio de Felipe Calderón y Vicente Fox como instrumento de negociación política, bien pudiera servir para hacer escándalo y bajar los recursos a las entidades federativas, entre ellas, Veracruz, y a la que le han sido tan retenidos, y quizá ordeñados.
Fernando Yunes es presidente de la Comisión de la Defensa Nacional desde donde podrá crecer lo suficiente, si se considera que Peña Nieto ha reiterado que el ejército y la marina continuarán en el país en la sórdida lucha contra los carteles.
Pero más aún porque ha llegado la hora, con el PRI en Los Pinos, de revisar el saldo de la llamada narcoguerra, con más de 60 mil muertos en el sexenio felipista.
POSDATA: Más información en el blog.expediente.mx
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