La plataforma Kulluk, propiedad de la petrolera Shell, la cual permanecía varada en el Golfo de Alaska, finalmente podría ser remolcada por la nave Aiviq, lejos de la zona donde encalló el pasado 31 de diciembre, pero la reputación de Shell ya está arruinada, señaló Greenpeace.
"Finalmente, la plataforma de Shell podrá ser recuperada, sin embargo, luego de este último fiasco, la reputación de la petrolera está en ruinas: Ahora es evidente y claro que es imposible extraer petróleo de manera segura en el Ártico y ha llegado el momento para que el gobierno de los Estados Unidos actúe. El presidente Barack Obama debe intervenir y redefinir su política en el norte helado y detener la extracción petrolera en la zona antes de que uno de estos conatos se convierta en un desastre ambiental que dañe a este frágil ecosistema”, advirtió Ben Ayliffe, activista de Greenpeace.
"El incidente del Kulluk ha evidenciado muchos problemas de seguridad y abre serias interrogantes para la empresa sobre la toma de decisiones. Los inversionistas deben estar atentos a este nuevo contratiempo y preguntarse cuánto más podrá Shell perseverar en sus intentos por impulsar un programa de perforación en el Ártico, gastando miles de millones de dólares en un programa caracterizado por errores de funcionamiento, uno tras otro".
El Kulluk está flotando en alta mar mientras que personal evalúa las condiciones de la embarcación y espera a que el clima mejore. Tres remolcadores adicionales y dos embarcaciones de respuesta ante derrames de hidrocarburos, están en estado de alerta junto con la Guardia Costera Alex Haley.
Juntos podemos exigir que se termine con la extracción petrolera en aguas profundas en el Ártico. Participa en la ciberacción dirigida a Barack Obama aquí: http://grpcemx.org/Sgx0Ug
Fuente: Greenpeace...
No hay comentarios:
Publicar un comentario