FATAL COINCIDENCIA

Por Fdo. Morales R. 

“… cualquier parecido con la coincidencia, es pura realidad” 

Luto y Memoria 

Lamento mucho la muerte de mis amigos y compañeros que desgraciadamente perdieron la vida en el “incidente” de PEMEX (Edificio B-2, Oficinas Centrales)… es mi oración por consuelo y fortaleza para los deudos… 

Mi solidaridad y empatía para todos aquellos que resultaron lesionados (física y emocionalmente); deseo de corazón pronto sanen y obtengan completa recuperación. 

15:55 Hrs. 

Después de escuchar una tremenda explosión, se fue la luz momentáneamente, y al mismo tiempo, se escuchó un estruendo que nos cimbró y estremeció. 

Sentimos como si se sumiera el edificio, literalmente, por el jalón hacia abajo, se me levantaron las piernas en vilo…. yo estaba en el edifico contiguo. 

Nos asomamos por las ventanas que dan hacia la Torre Ejecutiva (T.E.); poco o nada veíamos, pues una enorme nube de polvo, impedía cerciorarnos lo que había acontecido. 

Evacuamos el edifico B-1. Salimos cubriéndonos boca y nariz al patio central, esperando ver lo acecido en la T.E., y para nuestra sorpresa, estaba intacta. Al paso, una mujer mayor, “empanizada”, tirada en el camino. Se escuchaban grandes voces y lamentos que provenían del edifico B-2 que mostraba una imagen dantesca: habían desaparecido la planta baja y el mezzanine (1er. Piso). 

Las columnas de acero que sustentan el edificio siniestrado: torcidas y maltrechas… 

Centro Administrativo 

El Complejo (el Centro Administrativo, Oficinas Centrales de PEMEX), está compuesto por la T.E., los edificios: “A”, B-1, B-2, “C” y el CENDI. Sin tomar en cuenta los inmuebles que se encuentran en la misma zona, alrededor del mismo. 

La población (interna y externa) que alberga diariamente este Complejo, oscila entre los diez mil y doce mil quinientas personas. 

B-2 

El edificio siniestrado contaba con sótano, Planta Baja (P.B.), Mezzanine y once pisos más. 

En el sótano de este inmueble había una planta purificadora de agua que surtía a todo el complejo. 

En cada piso laboran aproximadamente 120 personas, sin incluir el personal externo. Alrededor de 1,700 trabajadores. 

Quienes en este edificio laboran, en su mayoría, nuestros amigos y compañeros, pertenecen a la Subsidiaria Pemex Refinación (P.Ref.) 

Los trabajadores sindicalizados de esta subsidiaria, a diferencia de todos los demás que laboramos ahí, tienen “checadores” en la P.B. para registrar su asistencia por la mañana y su salida, en punto de las 16:00 Hrs. 

A.C.R. 

La detonación, el estruendo, la tolvanera, los gritos, la sorpresa y el caos, nos impedían saber ¿Qué había pasado? 

El primer rumor: estallaron las calderas. Otros que un sobrecalentamiento en los ductos del Aire Acondicionado. Más tarde los medios de comunicación empezaron a difundir que una alta concentración de gases provocó el incidente. 

A la verdad de las cosas, no olía, ni nunca olió a gas. Tampoco a pólvora. 

Por la tarde noche me enteré que el gobierno había instruido a los medios masivos de comunicación a desinformar a la población con el cuento de que “una alta concentración de gas, provocó la detonación”. 

Las siglas A.C.R., hacen alusión a: Análisis-Causa-Raíz. 

Los A.C.R.’s que sirven para saber qué pasó, con el objeto de aprender y evitar en lo posible que “eso” vuelva a suceder, se lleva tiempo; a veces mucho tiempo… por qué precipitarse a decir “cosas” que al momento de este artículo NADIE SABE. 

Contrafactual 

¿Qué fue lo que realmente pasó? Varias son las líneas de investigación, que según el Gobierno Federal se están siguiendo. Y, solicitan no especular. 

A la verdad de las cosas, “el ciudadano de a pie” que no cuenta con los elementos de juicio, lo único que le queda es el “sospechosismo” y la especulación; sobre todo, cuando las autoridades instruyen a medios de comunicación difundir/promover lo que sería una de las varias líneas de investigación. 

Quizá debiéramos preguntarnos ¿por qué el gobierno está empeñado en hacerle creer a la opinión pública que lo que aconteció, fue un terrible accidente por acumulación de gas? 

Pudo haber sido accidente mortal, pero que fatal coincidencia que en el único edificio que tenía concentración de personal por salida de los trabajadores sindicalizados y el regreso a labores, después de su hora de comida, de los trabajadores de confianza, fuese el edifico B-2. 

Alrededor de cuatrocientos amigos y compañeros estuvieron en el lugar y el momento del incidente. Si lo que aconteció fue un atentado, quienes los perpetraron, sabían que ahí, en ese preciso momento y lugar, podían causar el mayor de los daños. 

Ahora bien, si “sólo” fue una coincidencia mortal ¿por qué arribaron “a la zona cero” la policía antimotines del DF, para después llegar la Policía Federal y más tarde el Ejercito, y finalmente la Marina Armada de México? ¿No es acaso esto un exceso de fuerzas especiales y tácticas para un trágico incidente? 

En PEMEX, Oficinas Centrales, se cuenta con sistemas de seguridad que “lo único” que pudiera violarlos serían explosivos plásticos. No digo que fue atentado, pero se parece mucho. 

No soy experto en estructuras ni experto en seguridad, ni lo pretendo, pero la estructura del edificio B-2 fue dañada severamente y, seguramente, deberá ser demolido. Si el evento hubiera sido la consecuencia de un atentado con algún tipo de explosivo, perpetrado por mentes criminales, calcularon mal la cantidad de explosivos… PEMEX y los petroleros de la República Mexicana, CONTINUAMOS EN PIE y al servicio de la Patria. 

A la memoria de nuestros hermanos, amigos y compañeros, que por respeto, omito sus nombres. Les recordaremos con cariño y admiración. SIEMPRE ESTARÁN EN NUESTRA MEMORIA Y CORAZONES.