Por Valentina Trejo…
Dando cumplimiento a los siete indicadores que marca el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), las próximas administraciones municipales ya no podrán manejar con autonomía los recursos otorgados a través del Fondo de Infraestructura Social Municipal (FISM) afirmó Alberto Silva Ramos, secretario de Desarrollo Social (Sedesol) Estatal.
El secretario estatal, comentó que dichos recursos representan cerca del 50 por ciento del presupuesto anual y de acuerdo a la Ley de Coordinación Fiscal con este nuevo esquema, será la Sedesol la vía para que se analice y se autorice si se aprueba o no la construcción de las obras púbicas solicitadas.
Manifestó que los recursos tendrán que ser aprobados por la secretaría y solo podrán utilizarlos en obras de combate a la pobreza, es decir, los encaminados a temas de electrificaciones, de acceso a la vivienda, temas educativos y salud, teniendo como propósito disminuir los índices de pobreza en México, mejorando las condiciones de vida de la población.
Agregó que estos serán recursos cuantiosos que se utilizaran en conjunto con las autoridades municipales, a quienes estarán llamando con anticipación para que los nuevos directores de obras, contralores y tesoreros se capaciten en este nuevo esquema que el congreso federal ha establecido a través de esta ley.
“Se estará garantizando la trasparencia y un buen manejo de los recursos federales, fundamental en la lucha dentro de la cruzada contra el hambre, por ello la Sedesol será la delegación quien apruebe el recurso que tendrá que ser destinado en alguno de los polígonos de pobreza que se encuentren en alguna ciudad o en alguno de los siete indicadores que se han marcado”, detalló.
Precisó que se podrá fin a la construcción de obras que no tenían un impacto en la mejora de los municipios, contribuyendo así al desarrollo y al apoyo de la población más vulnerable y combatiendo la pobreza extrema.
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