Sapos y Alacranes
Por Orlando Segura Hervert.
Dicen por ahí “Pueblo chico, infierno y chisme grande”, al medio día de este miércoles, comenzó a circular una publicación en internet que a punto estuvo de ser viral, pero más tardaron en subirla que el administrador en bajarla.
Resulta que alguien preguntaba que sabían del accidente del Cisne, en el que le daban flit al Diputado Federal y exalcalde Alberto Silva Ramos. A los pocos minutos la publicación ya no estaba, la habían borrado.
La versión también se la enviaron a otros portales de Xalapa y también daban cuenta del supuesto percance automovilístico en el que había fallecido.
El mexicano y el tuxpeño son muy dados al humor negro e inmediatamente en los comentarios preguntaban con ironía fina, sino iba Peña Nieto y Javier Duarte en la unidad automotriz (hágame usted el favor).
El presidente estatal del Partido Revolucionario Institucional recibió diversos mensajes, otros los puso en vistos, unos más solo los revisó, en determinados casos respondió con una carita sonriente y el virtual epitafio: “solo los muertos no responden”
Fueron sus adversarios que se adelantaron a las tradicionales inocentadas, decían sus amigos y fieles seguidores.
Fue el mismo el que filtró ese chisme para hacerse notar. Afirmaban sus acérrimos enemigos.
Lo cierto es que sus camaradas, su círculo cercano afirmaba: ¿Quién sabe de dónde salió esa pendejada? Y reiteraban… ¡El Cisne goza de cabal salud!.
Así es que si usted ve por algún rumbo de Xalapa o en un rincón de la entidad veracruzana al ave de altos vuelos, y no le nota ningún rasguño o golpe, entonces podrá confirmar que el político tuxpeño está más puesto que un calcetín para las tareas que le encomiende el PRI, Enrique Peña Nieto o Javier Duarte de Ochoa.
Pasando a otro tema, nuestra solidaridad con los pensionados y jubilados. Alto a la represión y el llamado para que se privilegie el diálogo y les paguen sus prestaciones.
Finalmente, hoy es 24 de diciembre, los cristianos celebra el nacimiento de Jesucristo. Feliz Navidad a nuestro auditorio y lectores.
Hasta pronto. Hasta siempre.
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