Sapos y Alacranes
Por Orlando Segura Hervert.
La fecha histórica de un 19 de septiembre de 1985 nos enseña cuan pequeño somos ante los designios del destino y la magnitud del universo.
Hace 32 años tembló en el Distrito Federal a las 7 de la mañana con 19 minutos y ahora, a 32 años de distancia los episodios telúricos se repiten, generando caos e infinidad de edificios completamente derrumbados, colapsados, ciento de personas atrapadas entre escombros como la Escuela Primaria "Enrique Rébsamen", son las paradojas de una sociedad castigada una y otra vez. La Jornada ante tales acontecimiento consignó por ejemplo: ¡La Tierra tronó y vino el desastre!
Las redes sociales dieron cuenta de los sucesos mediante fotos, vídeos, grabaciones, mientras en todo el país ondeaba la bandera nacional a media asta, recordando a los muertos de un 19 de septiembre pero de hace tres décadas con dos años. La naturaleza nuevamente nos recordaba la imperiosa necesidad de mantenerse unidos, solidarios, ante el dolor y la adversidad.
Aquí en Tuxpan, algunos no sintieron el temblor, otros si; en ese momento se llevaban algunos simulacros implementados por Protección Civil; lo que si es necesario, hay que reforzar los protocolos y la cultura de la prevención, so pena de sufrir tragedias de mayores consecuencias. No estamos preparados para enfrentar un infortunio de semejante magnitud.
Las escenas transmitidas por televisión fueron desgarradoras, nos tocó ver como edificios de varios pisos se venían abajo.
Ante todo eso, no queda de otra, para los que tienen fe, hacer una oración por México y levantarse de nuevo, ponerse de pie.
Dios nos encuentre confesados...
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