Por: Tere de Jesús Blasco Ramírez
El obispo de la diócesis de Tuxpan Juan Navarro Castellanos, se reunió con los medios de comunicación; con la finalidad de hacer hincapié en la postura de la iglesia católica, respecto a la penosa situación de inseguridad que se está viendo y viviendo en todo el territorio mexicano.
Señalo que estas últimas fechas, los medios de comunicación han hablado copiosamente de la agresión al futbolista paraguayo Salvador Cabañas; sin embargo todos los días hay noticias de robos, asesinatos y agresiones diversas.
Puntualizó, que la inseguridad es un tema que preocupa a todos, tanto a ciudadanos, como a los diferentes actores políticos, sociales y de la iglesia.
En este sentido, dijo que en México al igual que en muchos otros países se percibe un serio deterioro de la vida social, ante el crecimiento de la violencia que se manifiesta en asaltos, extorsiones, secuestros y sobretodo en asesinatos, que cada día destruyen vidas humanas y llenan de dolor a las familias y a la sociedad en general.
El representante de la feligresía católica en Tuxpan, comentó, que esta situación invita a la población a tomar consciencia, sobre lo que está mal en la sociedad, lo que está fallando en la convivencia social y sobre las actitudes que se deben asumir para revertir esta situación. “Sin duda estamos ante una realidad compleja, difícil de explicar, sobre todo al buscar las causas que la generan”; puntualizó el entrevistado.
En este sentido, dijo, que se puede hablar de la pobreza y la desigualdad; la desintegración familiar y el desempleo; la corrupción y la mentira, como generadores e impulsores de dicha descomposición de la sociedad; sin embargo el mal en cualquiera de sus manifestaciones, va generando más mal; que al seguir creciendo provoca esa avalancha arrasadora que parece nunca podrá terminar.
Finalmente, mencionó que para poder salir de esta problemática, la iglesia coincide, en que se necesita una renovación de las personas, de las familias y de la sociedad; toda vez que es urgente superar la cultura de la mentira, de la corrupción, porque cuando no hay justicia en cualquier nivel de la sociedad, se genera de manera fácil la violencia.
Por lo anterior expresó que será fundamental mejorar la educación en todos sus niveles y dimensiones; en la familia, en la escuela, en las iglesias, en los ambientes de trabajo y todos los ámbitos de la sociedad.
El obispo de la diócesis de Tuxpan Juan Navarro Castellanos, se reunió con los medios de comunicación; con la finalidad de hacer hincapié en la postura de la iglesia católica, respecto a la penosa situación de inseguridad que se está viendo y viviendo en todo el territorio mexicano.
Señalo que estas últimas fechas, los medios de comunicación han hablado copiosamente de la agresión al futbolista paraguayo Salvador Cabañas; sin embargo todos los días hay noticias de robos, asesinatos y agresiones diversas.
Puntualizó, que la inseguridad es un tema que preocupa a todos, tanto a ciudadanos, como a los diferentes actores políticos, sociales y de la iglesia.
En este sentido, dijo que en México al igual que en muchos otros países se percibe un serio deterioro de la vida social, ante el crecimiento de la violencia que se manifiesta en asaltos, extorsiones, secuestros y sobretodo en asesinatos, que cada día destruyen vidas humanas y llenan de dolor a las familias y a la sociedad en general.
El representante de la feligresía católica en Tuxpan, comentó, que esta situación invita a la población a tomar consciencia, sobre lo que está mal en la sociedad, lo que está fallando en la convivencia social y sobre las actitudes que se deben asumir para revertir esta situación. “Sin duda estamos ante una realidad compleja, difícil de explicar, sobre todo al buscar las causas que la generan”; puntualizó el entrevistado.
En este sentido, dijo, que se puede hablar de la pobreza y la desigualdad; la desintegración familiar y el desempleo; la corrupción y la mentira, como generadores e impulsores de dicha descomposición de la sociedad; sin embargo el mal en cualquiera de sus manifestaciones, va generando más mal; que al seguir creciendo provoca esa avalancha arrasadora que parece nunca podrá terminar.
Finalmente, mencionó que para poder salir de esta problemática, la iglesia coincide, en que se necesita una renovación de las personas, de las familias y de la sociedad; toda vez que es urgente superar la cultura de la mentira, de la corrupción, porque cuando no hay justicia en cualquier nivel de la sociedad, se genera de manera fácil la violencia.
Por lo anterior expresó que será fundamental mejorar la educación en todos sus niveles y dimensiones; en la familia, en la escuela, en las iglesias, en los ambientes de trabajo y todos los ámbitos de la sociedad.
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