sábado, 27 de noviembre de 2010

PULSO CRÍTICO... COLOQUIALMENTE HABLANDO... "LA BARCA DE ORO"


J. Enrique Olivera Arce

En Veracruz el cólera afortunadamente aún no nos llega, pero lo que es la cólera esta está presente y crece, reflejándose en el lenguaje, verbal o escrito, con el que coloquialmente la gente recurre para expresar, con rico léxico jarocho, el malestar que hace presa de su ánimo ante el ignominioso panorama político que nos ofrecen, hombres y mujeres, en el desempeño del servicio público y en especial el de los que se dicen representantes y voz autorizada de la voluntad popular.

No se trata del efecto del cambio climático en el ánimo de la gente. Mientras este no inunde nuestro hogar y dañe nuestro escaso patrimonio, nos es indiferente. Es la reiterada manifestación de cinismo impune que con motivo de los últimos días del gobierno de Fidel Herrera Beltrán, se insulta a la inteligencia de la ciudadanía. Como buenos veracruzanos somos güevones y valemadristas, pero vamos a misa, la mayoría no tiene un pelo de tonto.

El que ya se va, afirma sin el menor decoro y empacho que en la tesorería del gobierno estatal se tiene una reserva de 6 mil quinientos millones de pesos, dispuesta para pagar a los varios cientos de acreedores, proveedores, contratistas y humildes servidores públicos. Pero no se puede disponer de ésta, que de existir realmente, posiblemente esté “sudando”, en espera de hacer efectivos los pagos pendientes estratégicamente en el momento de mayor impacto mediático, mientras aumenta desesperación y cólera de los afectados.

Y el que llega, se truena los dedos ante la evidente amenaza de que para hacerle aparecer como “el bueno de la película” y heredero fiel, será quien generoso, como primer acto de gobierno disponga del dinero en caja para hacerle frente a los acreedores y, de paso, sea quien contrate la línea de crédito bancario por 10 mil millones de pesos. “Son chingaderas” se escucha en los corredores de la SEFIPLAN, “tenemos meses esperando se cubra lo que nos adeudan y, 6 mil quinientos millones de pesos, “sudan en los bancos”. ¿Si hay dinero n las arcas públicas, porqué no pagan?

Y la cólera crece y crece, reforzándose con aquella de los que tras las promesas no cumplidas, se quedaron colgados de la brocha; agregándose la que indudablemente acumulan miles de humildes servidores públicos que ni se le cubren a tiempo sus emolumentos honradamente devengados y, sin más, se les da a entender que no habrá aguinaldo.

Y mientras la cólera crece, se retroalimenta con el malestar que causa ver el enorme dispendio en que incurre la administración pública, con cientos de espectaculares que a lo largo y ancho de la entidad, con la imagen del ahora “negro de oro” en primer plano, anuncian que Fidel y Rosita le cumplieron a los veracruzanos. En la prensa impresa, radio, televisión y hasta en internet, que a lo largo del sexenio sirvieran de alfombra mágica para elevar a las alturas del Olimpo al “mejor gobernador que ha tenido Veracruz”, la misma cantaleta, ofendiendo la inteligencia de la audiencia.

En teoría el primer servidor público de la entidad, no se manda solo. Está sujeto a lo que manda la ley y dispone el Congreso local. Eso es teoría y grosera demagogia. Ni se atiende a la ley ni la diputación local está dispuesta a ir más allá de lo que el patrón impone. La mayoría priísta, justifica el exceso, en tanto sus opositores, pecando de ingenuos o de estultos, exigen transparencia en el gasto mediático de promoción de imagen y propaganda electoral en que incurriera a lo largo de seis años, quien, cual jibarito cancionero, marcha loco de contento hacia el autoexilio, con las arcas personales plenas del fruto del desorden y saqueo que tiene hoy al gobierno en bancarrota.

Se trata de “información reservada y restringida por el Instituto Veracruzano de Acceso a la Información”, el señor que manda en Veracruz decretó que durante 12 años permanecerá oculta a los ojos de los veracruzanos, es la respuesta oficial de la diputación priísta ante el berrinche de sus pares que, tras la derrota de sus candidatos a gobernador aún respiran por la herida, exigen información y transparencia.

Los beneficiarios del dispendio mediático, hoy multimillonarios, aplauden y se frotan las manos, en tanto que aquellos que sólo recibieran migajas, se unen al reclamo opositor.

Veracruz, refrendando amor a la par que ofrece despedida, canta ya, en referencia a quien en 6 días dice que se va, -afirmando, en los hechos, que seguirá gobernando a Veracruz-, no el escatológico chascarrillo del borracho que solía disfrutar en momentos de libaciones y alegría de aquella vieja melodía de la “Barca de Oro” para, al día siguiente llorar su desgracia. No, con alegría jarocha entona el “Yo ya me voy, solo vengo a despedirme / adiós mujer adiós para siempre, adiós / No volverán mis ojos a mirarte ni tus oídos escucharán mi canto / Voy a aumentar los mares con mi llanto / adiós mujer, adiós para siempre, adiós.

Los románticos, aquellos que medraran a la sombra del caudillo, entonan “las golondrinas”, en remembranza de aquella histórica despedida que al pie del “Ipiranga”, con lágrimas en los ojos dedicaran a Don Porfirio.

Los coléricos, los más afectados por el peor gobernador que ha padecido Veracruz, impotentes sólo cantan la cuenta regresiva, al compás de claridosas referencias maternales, entresacadas de ese florido y folclórico lenguaje coloquial, tan propio de malhumorado jarocho.

Sin embargo no todo es oscuro y tenebroso en Veracruz. Dios no quiere a los negros, pero, hasta el día de hoy, no nos castiga con el cólera, pandemia de la pobreza, que azota a los pueblos que han estado a merced de reyezuelos demagogos, autoritarios y rampantes.

pulsocritico@gmail.com

No hay comentarios: