Por B. López…
Referente a su situación ante el partido Acción Nacional, Miguel Martín López, diputado federal con licencia, aclara que en dos ocasiones solicitó se iniciara su proceso de incorporación a ese instituto político, sin embargo, por presiones políticas de la dirigencia municipal del Pan en Tuxpan los trámites ni siquiera se iniciaron.
Señaló que en diciembre de 2010, en vísperas de su informe de labores, denunció públicamente el boicot de que fue víctima por parte de la directiva municipal del Pan y algunos regidores, quienes presionaron con amenazas a las beneficiarias del programa Oportunidades para que no asistieran al informe.
Esta denuncia provocó la ira del entonces presidente del comité municipal del Pan, y ahora regidor, Lauro Hugo López Zumaya, quien valiéndose de infundios anunció en diversos medios de comunicación “de manera oficial el rompimiento entre el Partido Acción Nacional y el diputado federal Miguel Martín López”, aun cuando carecía de personalidad jurídica para anunciar en nombre del Pan la ruptura con un diputado federal.
No obstante, Miguel Martín intentó conservar la cercanía con el Pan, puesto que el local que ocupaban las oficinas, en la esquina de Revolución y Juárez, lo cedió en comodato a ese partido, sin que mediara pago alguno, como una contribución a las finanzas del comité municipal. “Y pese a la ruptura que él mismo anunciara, Lauro Hugo López Zumaya, en su calidad de presidente del comité, siguió ocupando el local por más de un año”.
“De modo que no pueden mostrarse sorprendidos, ni llamarse engañados, puesto que desde mediados de 2010, al darse cuenta de que no los apoyaría en sus planes de lucrar con los programas federales, hicieron todo lo posible por obstaculizar mi trabajo como legislador”, comenta Miguel Martín, y concluye: “Lo único que hice fue actuar en congruencia con la postura del comité local del PAN, ya que su actual presidenta, Hortensia Villalba, continuó con la campaña de injurias y descalificaciones que iniciara en su momento López Zumaya”.
Insistió en que no puede formar parte de un comité municipal que sigue abusando de la necesidad de las personas que acuden a solicitar los programas federales, al condicionarles la ayuda a cambio de favores políticos, ya que en lugar de montar una oficina la Sedesol ocupa las oficinas del PAN, como si fuese este partido quien otorga los programas que se financian con el dinero de todos los mexicanos.
Referente a su situación ante el partido Acción Nacional, Miguel Martín López, diputado federal con licencia, aclara que en dos ocasiones solicitó se iniciara su proceso de incorporación a ese instituto político, sin embargo, por presiones políticas de la dirigencia municipal del Pan en Tuxpan los trámites ni siquiera se iniciaron.
Señaló que en diciembre de 2010, en vísperas de su informe de labores, denunció públicamente el boicot de que fue víctima por parte de la directiva municipal del Pan y algunos regidores, quienes presionaron con amenazas a las beneficiarias del programa Oportunidades para que no asistieran al informe.
Esta denuncia provocó la ira del entonces presidente del comité municipal del Pan, y ahora regidor, Lauro Hugo López Zumaya, quien valiéndose de infundios anunció en diversos medios de comunicación “de manera oficial el rompimiento entre el Partido Acción Nacional y el diputado federal Miguel Martín López”, aun cuando carecía de personalidad jurídica para anunciar en nombre del Pan la ruptura con un diputado federal.
No obstante, Miguel Martín intentó conservar la cercanía con el Pan, puesto que el local que ocupaban las oficinas, en la esquina de Revolución y Juárez, lo cedió en comodato a ese partido, sin que mediara pago alguno, como una contribución a las finanzas del comité municipal. “Y pese a la ruptura que él mismo anunciara, Lauro Hugo López Zumaya, en su calidad de presidente del comité, siguió ocupando el local por más de un año”.
“De modo que no pueden mostrarse sorprendidos, ni llamarse engañados, puesto que desde mediados de 2010, al darse cuenta de que no los apoyaría en sus planes de lucrar con los programas federales, hicieron todo lo posible por obstaculizar mi trabajo como legislador”, comenta Miguel Martín, y concluye: “Lo único que hice fue actuar en congruencia con la postura del comité local del PAN, ya que su actual presidenta, Hortensia Villalba, continuó con la campaña de injurias y descalificaciones que iniciara en su momento López Zumaya”.
Insistió en que no puede formar parte de un comité municipal que sigue abusando de la necesidad de las personas que acuden a solicitar los programas federales, al condicionarles la ayuda a cambio de favores políticos, ya que en lugar de montar una oficina la Sedesol ocupa las oficinas del PAN, como si fuese este partido quien otorga los programas que se financian con el dinero de todos los mexicanos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario