Por Uriel Flores Aguayo…
Mientras entro en materia, ubicándome en áreas específicas de trabajo y tomo protesta, realizo labores provisionales de oficina, integración de equipos y gestiones múltiples; lo que no es provisional es mi solemne compromiso de no defraudar a los Xalapeños. De inicio, estoy recorriendo la ciudad para agradecer el voto, informar de resultados y ponerme en contacto domiciliario y telefónico con los ciudadanos. Vamos a terminar con la mala costumbre de que después del voto nunca se vuelve a ver a los representantes.
Considero muy honroso representar a los Xalapeños en la cámara de diputados, es una enorme responsabilidad en la que pondré todo mi empeño. Tengo un mandato popular, me debo a los ciudadanos solamente; no provengo del dedazo ni padrinazgo alguno, tampoco tengo prejuicios ni sectarismo partidista. Si se quiere dignificar la política en Xalapa es mejor predicar con el ejemplo: austeridad, transparencia y cercanía democrática con la gente.
Me asumo como representante popular en general, de todos: ricos y pobres, patrones y trabajadores, habitantes de colonias populares, de interés social y de las llamadas residenciales; representaré a los que tienen partido y a los que no, a los que piensan de una manera o de otra, no habrá siglas ni colores exclusivos; por supuesto que tengo una manera de pensar, una identidad y una orientación que va implícita en mi labor.
Voy a impulsar una agenda básica, que tenga que ver con la paz de Xalapa, con la dignificación de su vida política, con acciones de desarrollo social y, prioritariamente, buscaré involucrarme en iniciativas, programas y presupuestos para la juventud. Voy a convocar para que los ciudadanos organizados presenten proyectos de todo tipo que podamos impulsar con cierta viabilidad en el presupuesto de la federación.
Mientras entro en materia, ubicándome en áreas específicas de trabajo y tomo protesta, realizo labores provisionales de oficina, integración de equipos y gestiones múltiples; lo que no es provisional es mi solemne compromiso de no defraudar a los Xalapeños. De inicio, estoy recorriendo la ciudad para agradecer el voto, informar de resultados y ponerme en contacto domiciliario y telefónico con los ciudadanos. Vamos a terminar con la mala costumbre de que después del voto nunca se vuelve a ver a los representantes.
Considero muy honroso representar a los Xalapeños en la cámara de diputados, es una enorme responsabilidad en la que pondré todo mi empeño. Tengo un mandato popular, me debo a los ciudadanos solamente; no provengo del dedazo ni padrinazgo alguno, tampoco tengo prejuicios ni sectarismo partidista. Si se quiere dignificar la política en Xalapa es mejor predicar con el ejemplo: austeridad, transparencia y cercanía democrática con la gente.
Me asumo como representante popular en general, de todos: ricos y pobres, patrones y trabajadores, habitantes de colonias populares, de interés social y de las llamadas residenciales; representaré a los que tienen partido y a los que no, a los que piensan de una manera o de otra, no habrá siglas ni colores exclusivos; por supuesto que tengo una manera de pensar, una identidad y una orientación que va implícita en mi labor.
Voy a impulsar una agenda básica, que tenga que ver con la paz de Xalapa, con la dignificación de su vida política, con acciones de desarrollo social y, prioritariamente, buscaré involucrarme en iniciativas, programas y presupuestos para la juventud. Voy a convocar para que los ciudadanos organizados presenten proyectos de todo tipo que podamos impulsar con cierta viabilidad en el presupuesto de la federación.
De mi parte habrá una relación institucional, respetuosa y de colaboración con los diferentes niveles de gobierno y con los otros representantes populares, senadores y diputados federales y locales. Me interesa mantener una relación eficaz con el Gobernador del estado y la presidente municipal de Xalapa, con ellos hay mucho que trabajar en el apoyo de las grandes obras de infraestructura que requiere nuestra ciudad. Es curioso, no hay mala fe al decirlo, pero hasta la fecha no me ha llamado ni por cortesía la Lic. Elizabeth Morales, lo cual espero ocurra pronto en la medida de que ya pasaron las campañas y todos nos necesitamos por el bien de Xalapa.
Observo que los acomodos en el gabinete estatal y otras medidas que se están tomando tienen que ver con el reciente resultado electoral y con los preparativos para las elecciones del año próximo. Espero que en el análisis estratégico de los mandos políticos de Veracruz me vean en positivo, no como enemigo, para que no perdamos el tiempo en la defensa de mi trabajo y en la lucha contra cualquier intento de bloqueo. Doy y espero respeto, que no haya nada que obstruya la natural, obligada e indispensable interlocución que voy a tener con la ciudadanía xalapeña.
En la apertura democrática que debe ser el sello del gobierno veracruzano, no la regresión, se tiene que entender y aceptar el singular y estimulante comportamiento electoral de los Xalapeños, caracterizado por su pluralidad, alternancia y voto pensante. Lo que para nosotros es un orgullo no debe ser motivo de desprecio o castigo desde las instancias de poder. Es preferible asumir la realidad tal cual, respetar resultados y colaborar con todos los representantes populares poniendo por delante el interés general.
Recadito: sábado 21 y domingo 22 continuamos el recorrido del agradecimiento, la información y el contacto ciudadano.
Ufa.1959@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario