Por Orlando Segura Hervert…
La elección para elegir al Secretario General en el mercado “Enrique Rodríguez Cano”, no se llevó a cabo, bastaron las argucias, el colmillo, las triquiñuelas del líder eterno de ese centro de abastos, José Luis Portilla Nuñez, quien llegó enfermo y dijo que su última voluntad era que los locatarios aceptaran a su pupilo Guillermo Hernández.
No se impuso el Porfiriato, sino el Portillato, porque prácticamente ha ocupado el cargo de Secretario General durante 30 años.
José Luis Portilla arribó, cansado, sin ilusiones, ojeroso, pero con la firme convicción de que podía imponer a uno de sus incondicionales y así lo hizo.
En ese contexto, David Vargas Camargo fue impugnado varias veces, argumento que daba era interrumpido por las pocas huestes de Portilla y Compañía, por lo que el equipo de Vargas Camargo, optaron por no avalar dicha asamblea, ni tampoco participar en un proceso viciado.
En un tiempo el Sr. De las Horchatas, David Vargas, fue leal a quien el pasado 6 de diciembre lo impugnó y denostó, trabajó por el liderazgo del carnicero y ganadero, pero la conducción y dirigencia se agotó por lo que decidieron generar el cambio, mismo que no se pudo concretar, a pesar de que asistieron 105 locatarios de 168.
El “rechazado”, al ser abordado por la prensa, dijo que había demasiados intereses creados por “El Portillato”, renta de locales, traspasos, cambio de giros, hay negocios obscuros en ese lugar que no quieren que se den a conocer a la luz pública.
La asamblea fue ilegal, recurrieron a unos estatutos que nadie conoce y además son inexistentes, concluyó afirmando que la voluntad de los locatarios fue nuevamente pisoteada, la designación fue aberrante porque Guillermo Hernández no tiene representatividad.
La elección para elegir al Secretario General en el mercado “Enrique Rodríguez Cano”, no se llevó a cabo, bastaron las argucias, el colmillo, las triquiñuelas del líder eterno de ese centro de abastos, José Luis Portilla Nuñez, quien llegó enfermo y dijo que su última voluntad era que los locatarios aceptaran a su pupilo Guillermo Hernández.
No se impuso el Porfiriato, sino el Portillato, porque prácticamente ha ocupado el cargo de Secretario General durante 30 años.
José Luis Portilla arribó, cansado, sin ilusiones, ojeroso, pero con la firme convicción de que podía imponer a uno de sus incondicionales y así lo hizo.
En ese contexto, David Vargas Camargo fue impugnado varias veces, argumento que daba era interrumpido por las pocas huestes de Portilla y Compañía, por lo que el equipo de Vargas Camargo, optaron por no avalar dicha asamblea, ni tampoco participar en un proceso viciado.
En un tiempo el Sr. De las Horchatas, David Vargas, fue leal a quien el pasado 6 de diciembre lo impugnó y denostó, trabajó por el liderazgo del carnicero y ganadero, pero la conducción y dirigencia se agotó por lo que decidieron generar el cambio, mismo que no se pudo concretar, a pesar de que asistieron 105 locatarios de 168.
El “rechazado”, al ser abordado por la prensa, dijo que había demasiados intereses creados por “El Portillato”, renta de locales, traspasos, cambio de giros, hay negocios obscuros en ese lugar que no quieren que se den a conocer a la luz pública.
La asamblea fue ilegal, recurrieron a unos estatutos que nadie conoce y además son inexistentes, concluyó afirmando que la voluntad de los locatarios fue nuevamente pisoteada, la designación fue aberrante porque Guillermo Hernández no tiene representatividad.
1 comentario:
pero con cuantos votos perdi david digo pasen la informacion parecen nuevos ya se acostumbraron a que todo se los dan escrito vamos bien vamos paraq atras
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