Uriel Flores Aguayo
Como se sabe los Gobiernos Municipales funcionan con un cabildo que integran un presidente municipal, un sindico y uno o varios regidores, todos llamados ediles. La estructura y funcionamiento del Ayuntamiento reproduce, a escala, la división de poderes de la Republica: con un Presidente en papel ejecutivo y un cabildo en labores legislativas. Normalmente ,por costumbres y disposiciones de ley, se practica un presidencialismo municipal, relegando la actividad y la autoridad del Cabildo; desde las campañas electorales la imagen y el discurso se centra en el propuesto( a ) para la Presidencia; casi nadie se ocupa del resto de ediles. Es un error manejarlo así porque a diferencia de las elecciones federales y locales en el ámbito municipal se elige en conjunto; ya electos se integran como Cabildo, donde se delibera y decide sobre el presupuesto y los programas . Los Ayuntamientos tienen una conformación especial y singular, es en el Cabildo donde se reúnen con efectos concretos y legales tanto quien ejerce funciones ejecutivas como quienes realizan funciones deliberativas.
En los hechos el Cabildo es marginado por interés de la mayoría o del Presidente( a ) ,incluso por apatía o negociaciones de la propia oposición, volviéndose, muchas veces , en algo meramente formal, sin sesiones y con acuerdos prefabricados. Por la política tradicional, corruptora y antidemocrática el Cabildo se ha convertido en una acta o espacio de mini sesiones legitimadoras de lo previamente acordado. Es un desperdicio anti ciudadanía lo que se ha hecho con el Cabildo, que debiera ser el gran espacio de las deliberaciones de la vida municipal y el foro donde los ciudadanos expresaran sus opiniones e inquietudes.
La realidad de los Ayuntamientos Veracruzanos es terrible: saqueados hasta la ignominia, fabricantes de nuevos y viejos ricos, endeudados y en una ruta transexenal para los fines de un grupo político de corte rojo. Se ha degradado tanto la situación política de los Municipios que se observan llamativos experimentos políticos, con acomodos de improvisados y " cuates"; no se ve voluntad democrática del oficialismo ,sus prácticas reales intentan anular el pluralismo cooptando o golpeando a la oposición . Sin Municipios democráticos no habrá o será mas difícil que haya democracia en la Entidad.
Desde las campañas debe exigirse la publicación de las planillas en contienda, debe saberse de quienes se trata y que representan por si llegan a ocupar un cargo edilicio. Es muy importante que lleguen los mejores, que sean la expresión de la sociedad local, que no estén ahí solo por razones partidistas y que hagan una labor muy responsable. Al votar por un candidato a la Presidencia también se vota por su planilla, por lo tanto hay que ser más exigentes con sus perfiles; de alguna manera los problemas de los Ayuntamientos tienen que ver con la falta de compromiso de los ediles pero también con su bajo nivel cultural y democrático. Hay que exigir que se publiciten por los partidos todas sus propuestas edilicias y, a nivel legislativo, reformas para que también tengan facultades ejecutivas, de tal manera que se valore su aporte al municipio y se incluyan de forma definitiva en la vida del Gobierno desde las cuestiones administrativas y técnicas. .
En Xalapa, contamos con quince ediles, de los que, a excepción de la Presidenta, prácticamente son desconocidos el resto. Es así por el presidencialismo pero también por el bajo perfil, la apatía o la conveniencia de los demás. Nuestro Municipio es un ejemplo de lo que son Cabildos fallidos y de ornato. Estamos a tiempo en la campaña en curso de exigir la difusión de las planillas , de preguntar quiénes son y de definir el voto no solo por el Partido de que se trate o del que la encabeza.
El círculo virtuoso municipal tiene que ver con la más amplia votación ciudadana, el conocimiento de los perfiles y las propuestas de los aspirantes y, sobre todo, con elecciones limpias; si estas condiciones se cumplen por supuesto que los problema tienen solución y habrá un buen futuro para Xalapa. En las condiciones actuales hay que agregar la necesidad de la alternancia para salir del embudo que ha colocado el sistema. La alternancia tiene que ir por la izquierda y por el progresismo en general , de acuerdo a una ciudad que ha dado muestra de libertad y hasta rebeldía.
Recadito: Pensé que el " trastupijes" se desmayaba: entre gris y amarillo y con espuma en la boca.
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