jueves, 22 de agosto de 2013

EL CRISTERO DEL SIGLO XXI

•Con Peña Nieto, la cúpula eclesiástica recuperará el poder político y social que tuviera en el porfiriato y una parte del gobierno de Benito Juárez, quien decretara el estado laico 

•El mensaje simbólico está en un alcalde de Hidalgo que colocara la banda presidencial al Cristo de Jalpan 

Luis Velázquez

I

Todo está listo en el peñismo para que la cúpula eclesiástica recobre el poder político ejercido en el porfiriato hasta una parte del presidente Benito Juárez, quien decretara el Estado laico, la separación de la iglesia y el Estado.

El último aviso lo ha dado el presidente municipal de Ixmiquilpan, Hidalgo, la tierra del secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong.

El alcalde colocó la banda presidencial a la figura del Cristo de Jalpan, en la parroquia de San Miguel Arcángel.

Y el pueblo, mejor dicho, los feligreses, lo celebraron con vítores.

Así, quizá antes de que el peñismo llegue a los primeros tres años del sexenio, luego de que las reformas energética, fiscal, de telecomunicaciones y educativa sean aprobadas, la siguiente será la reforma política, donde la iglesia será restaurada en su poder político, social y económico.

Para entonces, los sacerdotes, obispos, arzobispos y cardenales podrán ser postulados por un partido político, quizá hasta el PRI, a un puesto de elección popular.

Y, claro, a unos ministros de la iglesia quedará corta la alcaldía. Buscarán, desde luego, la gubernatura, y pian pianito, hasta la presidencia de la república.

La iglesia, dueña de Los Pinos, pues en el objetivo también está, además del derecho a impartir religión en el sistema educativo del país, tener su televisora comercial nacional, y competir, digamos, hasta donde se pueda con Emilio Azcárraga, de Televisa, y/o con Ricardo Salinas Pliego, de TV Azteca.

II

El penúltimo aviso simbólico fue en Nuevo León, donde una alcaldesa entregó las llaves de la ciudad a Jesucristo.

Y aun cuando una parte de la elite política elevó el grito al cielo, en el cielo nadie la escuchó, porque otros más, como el alcalde de Ixmiquilpan, se han unido al coro celestial anunciando el nuevo tiempo bíblico consagrado con el peñismo.

Por eso mismo, Peña Nieto llevó a su novia, Gabriela Rivero, “La gaviota”, al Vaticano y la presentó a Benedicto XVI, anunciando, a nivel internacional, su inminente boda.

III

Con el presidente panista, Felipe Calderón, 18 estados del país aprobaron fast track, por dedazo, la prohibición a las bodas de gays y lesbianas.

Y al mismo tiempo, el veto para que ninguna pareja gay fuera autorizada para la adopción de un niño.

Por eso mismo, una diputada panista, Ana María Jiménez Ortiz, de Puebla, ha advertido al mundo que los gays nunca, jamás, podrán casarse, porque cuando tienen sexo imposible puedan mirarse a los ojos, cuando, caray, el 90 por ciento de las parejas cierran los ojos en el momento estelar.

IV

Es más, ni siquiera con los presidentes cristeros, Vicente Fox Quesada y Felipe Calderón, la cúpula eclesiástica había alentado tantas expectativas como ahora con Peña Nieto.

La iglesia, convalidando el triunfo priista en la elección del dominguito 7 de julio.

Posiciones y posesiones a la cúpula eclesiástica del país, como el caso, por ejemplo, en Veracruz, de la secretaría General de Gobierno para Gerardo Buganza Salmerón, ahora reproducida en la secretaría de Comunicaciones.

Y ni se diga con la presidencia de la Comisión Estatal de Derechos Humanos para el ex agente del Ministerio Público, Luis Fernando Perera Escamilla, el litigante del sacerdote pornográfico y pederasta de la diócesis de Xalapa, “El lobo estepario”, a quien la Procuraduría de Justicia del Distrito Federal tiene abierto el expediente, por más que la procu de Xalapa lo haya exonerado.

La diócesis del puerto jarocho metida hasta el tuétano en el Ayuntamiento de Boca del Río con Anselmo Estandía, el alcalde que en nombre del turismo decretara el bando de buen gobierno para declarar personas non gratas a los limosneros, franeleros, limpiaparabrisas y migrantes, condenados a la cárcel.

V

El México cristero, el país guadalupano, está por regresar por sus fueros y con fuero gracias al gobierno peñista.

Honor y gloria al presidente municipal de Ixmiquilpan, Hidalgo, la tierra del secretario de Gobernación, que sin remilgos colocara la banda presidencial al Cristo de Jalpan.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Esas son las consecuencias de haber aprobado el artculo 24 constitucional