El jueves pasado en el marco de la visita del presidente de Francia, Francois Hollande, se relanzó la relación bilateral entre México y Francia después de cinco años de tensiones por el caso de Florence Cassez.
Para el desarrollo de México es fundamental extender su presencia en el mundo y, en particular, reforzar las relaciones con los países de Europa. Al respecto, Francia y México tienen una relación histórica de fraternidad e intercambio comercial y cultural, por eso debemos interpretar la visita del presidente Hollande como el inicio de un periodo de relanzamiento en la relación de ambos países, con augurios de abundancia y beneficios mutuos.
El éxito de esta visita, en gran medida se debe a la inteligente estrategia presidencial en materia de relaciones exteriores -desde aquí nuestro reconocimiento al Canciller Meade- y a la disposición del primer mandatario francés por visitar nuestro país, buscando establecer varios acuerdos comerciales y de paso dejar en claro que México tiene mucho que ofrecer; de ahí que para la televisora internacional TV5 Monde, nuestro país es el nuevo “dorado” para las empresas francesas.
En diversas ocasiones he comentado y lo reitero, que para generar acuerdos importantes con países europeos es preciso generar acuerdos directos con cada país y no sólo a nivel central de la Unión Europea, porque si bien existe un Consejo Europeo, cada miembro lleva sus posiciones a la mesa de acuerdo a sus intereses, por eso México debe seguir despertando el interés de cada uno de estos países para obtener los beneficios esperados.
El principal diario económico de Francia destacó el gran número de acuerdos firmados en la reciente visita presidencial, al escribir una nota con el título “Entre Francia y México, proyectos en abundancia”, destacando los acuerdos de colaboración e intercambio en materia energética, industria aeronáutica, desarrollo sustentable, seguridad pública, salud y turismo.
Cabe destacar la fraternal invitación que hizo el presidente francés a nuestro presidente de la República, Enrique Peña Nieto, para visitar Francia el 14 de julio de 2015, a fin de presenciar los honores por el aniversario del inicio de la revolución francesa y aprovechar su estancia para atraer inversiones a México, dejando claro que ambos países comparten valores fundamentales, como: libertad, fraternidad, legalidad y humanitarismo.
Sin duda estrechar los lazos de cooperación entre México y Francia representará beneficios económicos y culturales para ambos pueblos, al abrirse un periodo nuevo de oportunidades.
En el Senado de la República existe el compromiso firme de contribuir a reforzar las relaciones internacionales. Este es nuestro compromiso como senadores de la República. Este es nuestro compromiso con el México moderno y de éxito que deseamos.
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