Por Orlando Segura Hervert.
El exalcalde, exdiputado local, radica en Xalapa pero cada ocasión que puede retorna a la tierra que alguna vez gobernó, en esta temporada invernal y decembrina, acudió a Tuxpan, saludó a los amigos e hizo lo mismo que hace en la Atenas Veracruzana, andar de café en café, dialogar con los compañeros, los priistas, ciudadanos y todo aquel que quiera intercambiar puntos de vista en torno a cómo practicar y ejercer la función pública.
Alberto Arango de la Huerta recuerda las gestiones realizada para la construcción del CONALEP de Santiago de la Peña, la Escuela Secundaria “Emiliano Zapata”, la rehabilitación del Hospital Civil “Dr. Emilio Alcázar”, la donación de automóviles para las prácticas del taller automotriz en la Escuela Secundaria Técnica 33 (hoy número 2), el nosocomio de Cerro Azul, un tramo del boulevard e innumerables calles, entre otras.
Dijo que cuando le tocó ser alcalde, no había recursos económicos, lo que si tenía era un enorme prestigio y respetabilidad por su trayectoria y la de su padre ( hace una pausa, sonríe y rememora el enojo de quien contribuyó a procrearlo, le reclamó el que en aquel entonces haya aceptado el cargo de Presidente Municipal… su padre le decía, ¿Por qué aceptaste?, van a rumorar que eres joto, mujeriego, rata, etc, etc.).
En ese contexto de poco efectivo presupuestal, acudía a los contactos, a los empresarios, a los políticos, les explicaba el proyecto, la idea general, y de esa manera, logró varios beneficios para los tuxpeños.
Nunca robó, siempre se comportó a cabalidad, manejó los dineros públicos con eficiencia y honestidad. Señaló que en cierta ocasión le ofrecieron un puesto para que vía impuestos apretará a los ciudadanos de este lugar; les respondió con un razonamiento chusco: “no puedo aceptar ese cargo por una sencilla razón, los tuxpeños chillan más que una puerca atorada en un alambre y yo no puedo joder a mi pueblo”.
El político en receso tiene innumerables anécdotas, es de plática amena, conoce el intrincado mundo de como se mueve el poder político porque ha estado cerca de él.
Hace unas semanas recibió tres invitaciones para participar como candidato a la diputación federal por el III distrito, al Movimiento Ciudadano, MORENA y una propuesta independiente, a todos con la diplomacia y cortesía del caso, les respondió que no. En tono agradecido, les extendió una negativa.
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