Por: Martha Cruz
Tuxpan, Ver.- El turismo no se ausentó, fluyó normalmente, tal vez lentamente; los que si brillaron por su ausencia fueron los inspectores de la Procuraduría Federal del Consumidor, quienes se comprompometieron con los prestadores de servicio, fundamentalmente con los restaurantros que para estas fechas ya estarían en la playa, interviniendo en la regulación y vigilancia de precios. Sin embargo, no llegaron.
La delegada estatal de la PROFECO, Elizabeth Morales García, indicó que estarían presentes en Tuxpan en Semana Santa.
Restauranteros señalaron que entre los acuerdos que se tomaron fue la instalación del módulo, respetar los precios, hacerlos visibles, evitar publicidad engañosa, dar a conocer los gramajes de los alimentos a expender, no condicionar el consumo y sobre todo, tratar con honestidad al cliente, el cual al final del día será quien producirá la derrama económica.
Dijeron que esperan no necesitar de esta instancia federal, pues se han colocado lonas en las que se dan a conocer los precios de los productos, y con ello evitar alguna sanción por parte de las autoridades.
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