ALMA GRANDE
La
oposición se diluye
Ángel
Álvaro Peña
Lo que
podría convertirse en un contrapeso en los diferentes espacios políticos
pareciera que se deshace dentro de los partidos de oposición que no se han dado
cuenta todavía de la dimensión de su derrota ni la problemática interna que
esta condición les impone.
El PAN,
el PRI y el PRD parecieran perderse entre sus intereses domésticos en lugar de
cohesionarse con propósitos urgentes en los que puede estar la sobrevivencia
como partido.
El PAN
no podrá avanzar mientras esté secuestrado por la novatez de una dirigencia que
gane Marko Cortés o el nieto de Gómez Morín, mostrarán la misma improvisación
que caracterizó las presidencias de Ricardo Anaya, Damián Zepeda y Marcelo
Torres.
En la
contienda por la presidencia del PAN, Ricardo Anaya tiene en los dos candidatos
a sus amigos incondicionales. A pesar de que Manuel Gómez Morín Martínez del
Río, nieto del fundador del partido, haga denuncias públicas por los moches y
las negociaciones que han caracterizado a Acción Nacional en los últimos años.
Sabemos
que Gómez Morín le debe su permanencia en el PAN a Ricardo Anaya, la Comisión
de Honor de dicho partido lo había expulsado, pero Ricardo Anaya, entonces
presidente de ese instituto político, consideró que ya se había sacrificado
demasiado el origen de ese partido, como para también sacar de sus filas al
nieto del fundador, y ordenó dejarlo en su lugar.
Lo que
sucedió es que Manuel Gómez Morín, el nieto, apoyó a un candidato del PRI,
contendiente por la presidencia
municipal de Ecatepec, Estado de México, motivo por el cual su expulsión estuvo
a punto de concretarse.
Además,
Manuel Gómez Morín, apoyó a candidatos de Morena en la pasada campaña,
sobretodo a Andrés Manuel López Obrador, con quien aparece en varias
fotografías luego de actos de proselitismo. Simpatizantes y militantes panistas
denunciaron lo anterior como una manera de impedir que una persona con esas
inconsistencias ideológicas pueda dirigir un partido político.
El PRI
tiene problemas internos que difícilmente podrá solucionar pronto. Además de la
crisis financiera que padece, el desprestigio que le persigue es interminable,
ocasionado por los excesos que fueron un hábito en el caso de muchos militantes
poco honestos y que daban a conocer conductas poco honorables, como es el caso
del dirigente de ese partido en la Ciudad de México, Cuauhtémoc Gutiérrez de la
Torre.
En el
Congreso de la Ciudad de México, la renuncia definitiva de Leonor Gómez Otegui
a la bancada del PRI dejó al descubierto el desgaste del tricolor. La expriista
reconoció que hay una ruptura personal con el grupo político que encabeza
Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, personaje que ha dejado en claro que no va a
criticar por el miedo que le provoca. Después de su salida, Gómez Otegui se
incorporó a la bancada del Partido del Trabajo en el Primer Congreso de la
Ciudad de México.
Pero la
decadencia del PRI no queda en las renuncias, sino que después de la salida de
Gómez Otegui a la bancada y a dos días de iniciado las funciones de los
diputados en el Congreso, la priista Edna Mariana Gutiérrez Rodríguez, pidió
licencia al cargo con el argumento de que “así convenía a sus intereses
personales”. Con esta salida logró llegar Sandra Esther Vaca Cortés como
diputada local del PRI por la vía plurinominal.
La
historia con el PRI de Vaca Cortés es sombría, es acusada de reclutar mujeres
jóvenes para la red de prostitución al interior del Partido Revolucionario
Institucional capitalino cuando estaba al frente Cuauhtémoc Gutiérrez de la
Torre, en ese momento solo se desempeñaba como secretaria particular del “Rey
Basura”, pero ya gozaba de privilegios al interior del partido, pues se
encontraban en la nómina dos de sus hermanas, Luisa Stephany y Mónica Yanahuit,
cobraban cinco mil pesos “desempeñándose” como auxiliares administrativas.
Ambas renunciaron cuando se destapó la red de prostitución en el partido.
Ahora,
Vaca Cortés fue designada a la Comisión de Atención al Desarrollo de la Niñez
del Congreso, la cual ha sido criticada por organizaciones de la sociedad civil
tras su pasado como tratante de mujeres, al igual la ex priista Gómez Otegui,
consideró que su llegada se trató de una decisión cupular “autorizada por todas
las autoridades del partido”, ya que la dirigencia del PRI nunca ha pedido la
opinión de sus militantes para definir los nombres de sus legisladores
plurinominales o de representación proporcional a nivel federal o estatal. Ante
estas acusaciones, el PRI terminó por retirarla de la presidencia de dicha
comisión.
Esto sin
tomar en cuenta que el adelgazamiento de la nómina del tricolor será forzosa,
el despido de otros y la suspensión de prerrogativas del CEN a los consejos
estatales que serán letales para la intención de reactivar ese partido y volver
a hacerlo competitivo. Los militantes ya no creen en su lideresa y la
dispersión de las tareas los condena a
una larga jornada de reestructuración que ni con la reforma que planean
podrán recuperarse.
Por lo
pronto no se vislumbra triunfo electoral de ese partido en las próximas
elecciones.
El PRD
no está mejor, de hecho es el partido de oposición más pequeño en todos los
sentidos. El partido del sol azteca está a punto de perder su representación en
el Senado, porque al renunciar el perredista Israel Zamora Guzmán , y pasarse a
las filas del Partido Verde, solo quedan cuatro senadores, prácticamente sin
experiencia parlamentaria, con poco trabajo partidista, a las órdenes de un
coordinador parlamentario que no es perredista, Miguel Ángel Mancera Espinosa,
quien nunca ha pertenecido a partido
político alguno y se caracteriza por su oportunismo partidista, trató de
negociar con el PRI la posibilidad de convertirse en candidato de ese partido a
la Presidencia de la República.
El
Senado de la República solo acepta otorgar curules a cada partido político,
siempre y cuando no sean menos de cinco, de no completar dicha cifra, la
representación senatorial se le retira completamente a dicho instituto
político, y se quedarían sin senadores. Si a esto sumamos el hecho de que el desprestigio
de algunos militantes que tuvieron puestos se excedieron en sus funciones, el
PRD pareciera estar destinado a la desaparición paulatina pero constante.
La
oposición en México debe refundarse, reactivarse, volver a nacer si es
necesario para poder sentar un equilibrio no sólo en las cámaras sino en la
vida política del país.
PEGA Y CORRE.- En 2011, en la
administración de Javier Duarte, se aprobó una ley que castigaba la emisión de
afirmaciones falsas a través de las redes sociales, pero fue declarada
inconstitucional por la Suprema Corte de Justicia en 2013, por considerarla
violatoria de derechos humanos consagrados en la Constitución. Ahora los legisladores
de Veracruz aprobaron una ley con la que se puede castigar hasta con dos años
de prisión a quien difunda fotos (reales o fotomontajes) o “memes” que dañen la
reputación de una persona. Si consideran que con estas expresiones se desgasta
la figura pública de los funcionarios están muy equivocados, a veces se
fortalece. Porque en esas bromas y chistes va una válvula de escape cuya indignación
no sale de ahí, es decir, sirve para que el descontento tenga una salida y, al
mismo tiempo, se impida cada acción contra lo que provoca la
inconformidad…
Dudas y comentarios:
angelalvarop@hotmail.com
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