viernes, 19 de septiembre de 2008

LOS TAXISTAS ESPERAN EL AUMENTO A 6 PESOS EN EL PASAJE



Orlando Segura Hervert.

Hasta la fecha los taxistas no tienen conocimiento oficial del aumento a 6 pesos en el pasaje, sus dirigentes ni las autoridades de Tránsito del Estado les han comunicado absolutamente nada, pero la situación apremia, señalaron a este medio, varios trabajadores del volante que se dedican a transportar pasajeros en las diferentes rutas de la ciudad y el municipio tuxpeño.
Corre el rumor, dijo uno de los entrevistados, pero hasta ahí, no tenemos los detalles; lo que si es inequitativo es el hecho de que los micros ya están cobrando los seis pesos.
No tardan en autorizarnos el aumento, comentó otro y agregó, la gasolina cada semana está subiendo, cuestión que afecta a este gremio.
800 familias aproximadamente, viven de lo que se denomina la “chofereada”, están divididos en turnos de 12 horas, generalmente laboran de 2 de la tarde a dos de la madrugada; unos minutos antes, acuden a las diferentes gasolineras de la ciudad, cargan el tanque y lavan la unidad, luego proceden a entregar el taxi a la siguiente personas que ya los está esperando para volver a repetir el ciclo.
Los taxistas ven bien un incremento en el pasaje y lo justifican por el alza que está sufriendo la gasolina, pero por otra parte, la mayoría de la población se le hace un exceso el que se quiera subir el pasaje.
La situación no está fácil para nadie, en Tuxpan casi no hay trabajo, los que existen están mal pagados, señalaron algunas señoras que estaban escuchando la plática. Así las cosas, las opiniones se dividen, entre quienes ven esfumadas sus ganancias y aquellos que tienen la necesidad de utilizar el trasporte para acudir a la escuela, los centros de trabajo, de compras, paseo o de visita a la familia. Cada quien da su punto de vista, por ejemplo Doña Hortencia argumenta que sus familiares acuden a las instituciones educativas que están antes de llegar a Tampamachoco, ella vive en Infonavit Puerto Pesquero y para trasportarlos tienen que tomar dos rutas, tan solo en uno de sus sobrinos debe de gastar diez pesos de ida y otros tantos de regreso, indica que tienen que reservar o apartar al menos 500 pesos al mes; toda resignada, finaliza su comentario: “¿ a donde vamos a parar?

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