Orlando Segura Hervert.
En la mañana, vecinos de la colonia Azteca y otras más ubicadas en la zona, hicieron acto de presencia en la Presidencia Municipal, ahí externaron su inconformidad porque observaban pasividad para resolver el incendio del antiguo basurero, mismo que ha causado molestias, alergias, afectaciones al sistema pulmonar de infinidad de habitantes.
La movilización causó el impacto deseado, puso las pilas de los ediles Azalea Portilla Nuñez, Celestino Cuervo Cruz, Odilón Nava Sánchez, comisionados en Protección Civil, Salud Pública, Ecología, y en menos que “canta un gallo”, enviaron al lugar, más pipas, una máquina y personal para combatir el fuego en una superficie de 5 hectáreas.
Dicha superficie funcionó durante 30 años, en ella se albergaron aproximadamente 555 mil toneladas de desperdicio, tan es así que en el momento en que comenzó a trabajar el equipo pesado para remover los desperdicios, se observaron latas, plásticos, botellas. A lo lejos, los pepenadores, algunos niños que hicieron su agosto porque mencionaron que al momento de que la máquina pasa por algunos sectores, deja al descubierto ciertos metales que todavía se pueden vender como fierro viejo.
Desde el sábado pasado, la sociedad se ha quejado porque le ha tocado respirar el humo que ha dejado escapar este basurero que en su interior resguarda infinidad de gases, tan es así que los bomberos infructuosamente han echado miles de litros de agua y cuando apagan un lado, inmediatamente aparece la lumbre por otro, de ahí la inquietud de los vecinos, quienes solicitaron que se incorpore más personal, se combata con mayor eficacia el siniestro, se aplique equipo de mayor peso y además se le tire más tierra para finalmente apagar y controlar el fuego.
En antaño, varios candidatos a la alcaldía presentaron algunos proyectos para transformar el basurero en un parque ecológico, inclusive planteaban convertir dicho espacio en un lugar con energía propia, aprovechando las emanaciones que se encuentran en la parte baja de la superficie, pero desafortunadamente, dichos personajes perdieron y la idea no fue recogida por los que ganaron, tan es así que todavía se tiene que convivir con los agentes contaminantes de este sector y sus consecuencias.
En la mañana, vecinos de la colonia Azteca y otras más ubicadas en la zona, hicieron acto de presencia en la Presidencia Municipal, ahí externaron su inconformidad porque observaban pasividad para resolver el incendio del antiguo basurero, mismo que ha causado molestias, alergias, afectaciones al sistema pulmonar de infinidad de habitantes.
La movilización causó el impacto deseado, puso las pilas de los ediles Azalea Portilla Nuñez, Celestino Cuervo Cruz, Odilón Nava Sánchez, comisionados en Protección Civil, Salud Pública, Ecología, y en menos que “canta un gallo”, enviaron al lugar, más pipas, una máquina y personal para combatir el fuego en una superficie de 5 hectáreas.
Dicha superficie funcionó durante 30 años, en ella se albergaron aproximadamente 555 mil toneladas de desperdicio, tan es así que en el momento en que comenzó a trabajar el equipo pesado para remover los desperdicios, se observaron latas, plásticos, botellas. A lo lejos, los pepenadores, algunos niños que hicieron su agosto porque mencionaron que al momento de que la máquina pasa por algunos sectores, deja al descubierto ciertos metales que todavía se pueden vender como fierro viejo.
Desde el sábado pasado, la sociedad se ha quejado porque le ha tocado respirar el humo que ha dejado escapar este basurero que en su interior resguarda infinidad de gases, tan es así que los bomberos infructuosamente han echado miles de litros de agua y cuando apagan un lado, inmediatamente aparece la lumbre por otro, de ahí la inquietud de los vecinos, quienes solicitaron que se incorpore más personal, se combata con mayor eficacia el siniestro, se aplique equipo de mayor peso y además se le tire más tierra para finalmente apagar y controlar el fuego.
En antaño, varios candidatos a la alcaldía presentaron algunos proyectos para transformar el basurero en un parque ecológico, inclusive planteaban convertir dicho espacio en un lugar con energía propia, aprovechando las emanaciones que se encuentran en la parte baja de la superficie, pero desafortunadamente, dichos personajes perdieron y la idea no fue recogida por los que ganaron, tan es así que todavía se tiene que convivir con los agentes contaminantes de este sector y sus consecuencias.
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