Las marchas afectarán principalmente a los negocios instalados en el corredor Reforma-Zócalo; la Canaco calcula que las afectaciones serían mayores de durar más tiempo este conflicto
Por: Enrique Duarte
CIUDAD DE MÉXICO (CNNExpansión.com) — Las marchas que realizará el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) este miércoles en la Ciudad de México, causarán pérdidas de hasta 600 millones de pesos para los negocios, según estimaciones de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de la Ciudad de México (Canaco-Servytur).
"Sin embargo, cuando estas marchas son muy publicitadas y si se llevan todo el día entonces se multiplican las pérdidas", dijo en entrevista el presidente de la Canaco, Arturo Mendicuti.
El SME inició una serie de protestas, en la Ciudad de México y otras entidades de la República, en contra de la liquidación de Luz y Fuerza del Centro (LyFC) que realizó la administración del presidente Felipe Calderón el pasado 11 de octubre.
En la Ciudad de México, capital del país, el sindicato tiene planeado protestar en las instalaciones de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), instalada en la avenida Reforma; en la Secretaría de Hacienda, frente a la Alameda Central; en la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (Eje Central) y en la Secretaria del Trabajo, Periférico Sur.
A su vez, por la tarde se reunirá un contingente mayor en el Ángel de la Independencia (avenida Reforma), para salir rumbo a la residencia oficial de Los Pinos.
Esta marcha afectará a los negocios instalados en el corredor Reforma-Zócalo, dos zonas importantes de la ciudad.
"Tenemos el cálculo que por cada marcha que dura aproximadamente cuatro horas en la Cuidad de México, genera una pérdida entre 550 y 600 millones de pesos", dijo Mendicuti.
"Eso sin considerar que los empresarios aún en estas condiciones tienen que seguir pagando sus gastos como renta, luz, agua, etc.", agregó el empresario.
Luz y Fuerza del Centro generaba, vendía y distribuía energía eléctrica a varios municipios de estados de la zona central del país como Puebla, Estado de México, Morelos e Hidalgo, además de la Ciudad de México. El Gobierno decidió liquidar a la empresa argumentando ineficiencias en el servicio, cobros caros y un alto costo para las finanzas públicas.
Alrededor de 44,000 empleados de la paraestatal fueron despedidos; las autoridades indemnizarán a cada uno de ellos con dos años y medio de su sueldo, según sus propios cálculos, una oferta que concluye el 14 de noviemmbre.
La Secretaría del Trabajo ha dicho que poco más de la mitad de los ex empleados ha cobrado este pago.
La Cámara de Diputados aplazó recientemente la discusión sobre si presentarán una controversia constitucional por la liquidación de LyFC. Mientras tanto, la Suprema Corte de Justicia ya desechó una de ellas presentada por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.
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