Por Roberto López Arán...
La tarde noche del día martes pasado fue amarga, y lo serán aún más los días por venir para los veracruzanos que esperábamos que la última autoridad en materia electoral enderezara ese entuerto en que convirtieron Fidel Herrera y sus tartufos la elección local del aquel domingo 4 de julio.
No fue así y la desesperanza se abona. Veracruz como estado de la federación no conoce otra forma de gobierno que la viciada, incompetente y despilfarradora con que se han conducido los más de los gobernadores del PRI que han encabezado su poder ejecutivo. Veracruz es el cabús de ese tren que debiera dirigirse hacia la alternancia en el poder; uno de los estados donde los ciudadanos no conocemos otro sabor público que el de la hiel que cada seis años nos prescriben los priistas desde Jalapa.
Hoy miércoles en grandes titulares El Universal cabecea: México, “más corrupto” y “menos democrático”. Sin lugar a dudas, y deberemos los mexicanos, pero los veracruzanos en vigencia propia, padecer de esta realidad que no tiene vuelta de hoja, hoy por lo menos.
“La Oposición no comprobó fraude en Veracruz”, dice también El Universal que dijeron en el Trife (sic) para ratificar el triunfo de Javier Duarte al gobierno de Veracruz.
Días aciagos para ciudadanos y partidos políticos que debimos estar más afanados en recoger la mierda que el lobo iba dejando que en contener al propio lobo. Pues aquélla era más importante, según los magistrados, para los fines de acreditar la ignominiosa trampa electoral.
Leí en una nota española: “Gobernantes con bocas sin verdad y frutos incomestibles”. Así han sido en el Pri, lo son y lo serán. Días aciagos.
No fue así y la desesperanza se abona. Veracruz como estado de la federación no conoce otra forma de gobierno que la viciada, incompetente y despilfarradora con que se han conducido los más de los gobernadores del PRI que han encabezado su poder ejecutivo. Veracruz es el cabús de ese tren que debiera dirigirse hacia la alternancia en el poder; uno de los estados donde los ciudadanos no conocemos otro sabor público que el de la hiel que cada seis años nos prescriben los priistas desde Jalapa.
Hoy miércoles en grandes titulares El Universal cabecea: México, “más corrupto” y “menos democrático”. Sin lugar a dudas, y deberemos los mexicanos, pero los veracruzanos en vigencia propia, padecer de esta realidad que no tiene vuelta de hoja, hoy por lo menos.
“La Oposición no comprobó fraude en Veracruz”, dice también El Universal que dijeron en el Trife (sic) para ratificar el triunfo de Javier Duarte al gobierno de Veracruz.
Días aciagos para ciudadanos y partidos políticos que debimos estar más afanados en recoger la mierda que el lobo iba dejando que en contener al propio lobo. Pues aquélla era más importante, según los magistrados, para los fines de acreditar la ignominiosa trampa electoral.
Leí en una nota española: “Gobernantes con bocas sin verdad y frutos incomestibles”. Así han sido en el Pri, lo son y lo serán. Días aciagos.
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