ENVIADO A VAXTUXPA...
Por Dip. Federal Laura Itzel Castillo Juárez.
El pasado 20 de agosto me disponía a aterrizar en el aeropuerto de la ciudad de México a bordo de un avión, cuando la nave volvió a emprender su vuelo, a unos cuantos segundos de tocar la pista.
Desde cabina explicaron, minutos después, que por cuestiones atmosféricas había sido imposible aterrizar y que se haría otro “intento”. Todo ello, en el marco de la tormenta con chubascos, que desde temprana hora había pronosticado el Servicio Meteorológico Nacional.
La Auditoría Superior de la Federación (ASF), institución encargada de fiscalizar a cualquier ente que ejerza recursos públicos, concluyó que en el periodo 2006-2010ocurrieron 25 accidentes, definidos éstos como sucesos en los que se causa muerte o lesión a personas, o se daña a muebles y a inmuebles.
Todos estos percances ocurrieron dentro de alguna de las instalaciones de los 35 aeropuertos que están concesionados, en el lapso citado, los cuales se incrementaron 66.7% del año 2006 al 2010.
La información se desprende de la revisión de la cuenta pública 2010, por lo que preocupa el parámetro utilizado para medir el sistema de seguridad.
Entre los accidentes destacan los errores humanos, ya sea del piloto o del personal de apoyo en tierra, así como también el inadecuado mantenimiento o la falta de supervisión, la fatiga y la distracción.
Me pregunto: ¿se estarán cumpliendo los derechos laborales de los trabajadores? ¿Estarán considerando las normas internacionales?
Además de los accidentes, se encuentran los denominados incidentes, que son sucesos, que sin llegar a considerarse accidentes, afectan de manera importante la seguridad de las operaciones.
En esta clasificación se reportaron 204, en el mismo periodo analizado por la Auditoría Superior de la Federación.
Esta problemática afecta a millones de personas. Conforme lo señala la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), en el 2008 se transportaron 87.6 millones de pasajeros, de los cuales, una tercera parte correspondieron al transporte internacional.
Es importante recordar que este mes cumplen dos años en la calle los trabajadores de Mexicana de Aviación.
Son más de 8 mil 600 las personas que siguen en la lucha por la justicia y reclaman una solución favorable al conflicto. Cada vez es más claro que las autoridades buscan su quiebra, por lo que una y otra vez ponen más trabas.
El gobierno no da certidumbre a inversionistas y solapa a Gastón Azcárraga, presidente del Grupo Posadas y responsable directo de la situación que enfrenta la aerolínea, quien la recibió a cambio de haber apoyado la campaña de Vicente Fox a la Presidencia de la República.
Es fundamental que los trabajadores tengan las mejores condiciones para prestar sus servicios y que existan garantías para la seguridad de los millones de pasajeros. No pueden escatimarse sus derechos.
Esto y muchas cosas más iba pensando aceleradamente, mientras el siguiente “intento” de aterrizaje se lograba. La inestabilidad atmosférica, como la política, no habían variado en ese lapso. Llegamos a nuestro destino, desgraciadamente el país continúa en picada en medio de la turbulencia.
El pasado 20 de agosto me disponía a aterrizar en el aeropuerto de la ciudad de México a bordo de un avión, cuando la nave volvió a emprender su vuelo, a unos cuantos segundos de tocar la pista.
Desde cabina explicaron, minutos después, que por cuestiones atmosféricas había sido imposible aterrizar y que se haría otro “intento”. Todo ello, en el marco de la tormenta con chubascos, que desde temprana hora había pronosticado el Servicio Meteorológico Nacional.
La Auditoría Superior de la Federación (ASF), institución encargada de fiscalizar a cualquier ente que ejerza recursos públicos, concluyó que en el periodo 2006-2010ocurrieron 25 accidentes, definidos éstos como sucesos en los que se causa muerte o lesión a personas, o se daña a muebles y a inmuebles.
Todos estos percances ocurrieron dentro de alguna de las instalaciones de los 35 aeropuertos que están concesionados, en el lapso citado, los cuales se incrementaron 66.7% del año 2006 al 2010.
La información se desprende de la revisión de la cuenta pública 2010, por lo que preocupa el parámetro utilizado para medir el sistema de seguridad.
Entre los accidentes destacan los errores humanos, ya sea del piloto o del personal de apoyo en tierra, así como también el inadecuado mantenimiento o la falta de supervisión, la fatiga y la distracción.
Me pregunto: ¿se estarán cumpliendo los derechos laborales de los trabajadores? ¿Estarán considerando las normas internacionales?
Además de los accidentes, se encuentran los denominados incidentes, que son sucesos, que sin llegar a considerarse accidentes, afectan de manera importante la seguridad de las operaciones.
En esta clasificación se reportaron 204, en el mismo periodo analizado por la Auditoría Superior de la Federación.
Esta problemática afecta a millones de personas. Conforme lo señala la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), en el 2008 se transportaron 87.6 millones de pasajeros, de los cuales, una tercera parte correspondieron al transporte internacional.
Es importante recordar que este mes cumplen dos años en la calle los trabajadores de Mexicana de Aviación.
Son más de 8 mil 600 las personas que siguen en la lucha por la justicia y reclaman una solución favorable al conflicto. Cada vez es más claro que las autoridades buscan su quiebra, por lo que una y otra vez ponen más trabas.
El gobierno no da certidumbre a inversionistas y solapa a Gastón Azcárraga, presidente del Grupo Posadas y responsable directo de la situación que enfrenta la aerolínea, quien la recibió a cambio de haber apoyado la campaña de Vicente Fox a la Presidencia de la República.
Es fundamental que los trabajadores tengan las mejores condiciones para prestar sus servicios y que existan garantías para la seguridad de los millones de pasajeros. No pueden escatimarse sus derechos.
Esto y muchas cosas más iba pensando aceleradamente, mientras el siguiente “intento” de aterrizaje se lograba. La inestabilidad atmosférica, como la política, no habían variado en ese lapso. Llegamos a nuestro destino, desgraciadamente el país continúa en picada en medio de la turbulencia.
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