Por: Martha Cruz
Las estadísticas que se están presentando ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos de la violencia en el noviazgo ha incrementado durante los últimos años, misma que se presenta desde pequeños actos por parte de una pareja y sin darse cuenta termina siendo tanto emocional como física.
De acuerdo a lo mencionado por el titular de la CEDH en la zona norte Tonatiuh Hernández Sarmiento señaló que las agresiones en la pareja inician desde simples actitudes como revisar el celular o cuestionar por celos aunque sean en menor grado, entre otras.
“Muchas veces pensamos que la violencia en una relación de pareja sólo es física, pero lo cierto es que no, la violencia y generalmente cuando tienen mayores repercusiones es cuando es una violencia emocional, que es la que deja secuelas serias”.
Agregó que en el noviazgo se define como todo ataque intencional de tipo sexual, físico o psíquico, de un miembro de la pareja contra el otro en una relación de noviazgo con el objeto de controlar o dominar a la persona. Este conflicto no sólo se puede presentarse de una persona sino que también puede ser mutua.
“Comúnmente en este tipo de relaciones se tiende a caer en círculos viciosos de los que es realmente difícil salir, puesto que el perpetrador tiende a estar arrepentido del acto cometido. Este es el motivo por el cual suele pedir disculpas, se comporta de manera cariñosa tratando de enmendar el error para regresar en algún punto a ser violento nuevamente”.
Destacó síntomas como el maltrato emocional o el más común, el maltrato psicológico, pidiendo cambios ya sean físicos o conductuales que al agresor le disgusten, como puede ser el caso de la vestimenta, amistades y forma de ser, entre otros.
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