Por GEA...
Otatal es una de las comunidades con mayor índice de pobreza en el municipio, es un lugar apartado en el que se llega por la carretera a Tampico y posteriormente, hay que continuar por una desviación, un camino de terracería. Un pequeño poblado en el que el gobierno municipal, el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia y otras instancias, coordinaron acciones para contribuir en elevar las condiciones de salud y de educación de ese lugar.
Las madres de familia plantearon inquietudes de sus hijos (50 alumnos) que concluyeron un grado escolar, pero desean continuar estudiando en mejores condiciones, señalaron que si a ellos como personas mayores no les sonrío la fortuna, están haciendo esfuerzos para que los pequeños llegue a ser alguien en la vida, puedan alcanzar niveles superiores, una vez que concluyan parte del nivel básico de estudio, como son preescolar y primaria.
El alcalde Alberto Silva Ramos reivindicó la educación como única fórmula de superación personal y colectiva, solo así se alcanza la grandeza de la sociedad, solo con preparación y capacitación, las generaciones pueden construir en otras condiciones horizontes diferentes.
Pueblos educados, formados en la academia y en la vida, con valores y principios, podrán enfrentar cualquier reto y adversidad, tendrán los elementos suficientes para sortear las dificultades.
Pero por otra parte, es indispensable que la niñez crezca en condiciones saludables, para que no los derroten las enfermedades prevenibles y puedan ser en el mediano plazo hombres y mujeres de bien, que sirvan a su lugar de origen, a la región y el estado.
En el marco de la salud, y a petición de los habitantes, personal de parques y jardines, realizó tareas de limpieza en las áreas verdes, en el perímetro de la escuela y la capilla y en las cercanías de los hogares, con el objetivo de reducir los factores de crecimiento del mosquito transmisor del dengue.
En el contexto de estímulos a la educación, el DIF recibió varias propuestas de niños de escasos recursos a quienes se les buscará un padrino y de esta forma se les dotará de útiles escolares, uniformes, zapatos, es un programa muy estimulante para los sectores vulnerables. Pero además, dinamiza a la sociedad, convierte a los actores sociales más participativos, les despierta la conciencia y el corazón. “Apadrina a un niño”, está sensibilizando a empresarios, pequeños productores, profesionistas, líderes sociales, porque de esa manera pueden ayudar y ser útil a los demás.
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