El affaire Blackstone
Por: Nancy Jácome
Tras el éxito literario de Cincuenta Sombras de Grey, se desato el “boom” editorial por todas aquellas historias que implican sexo y un hombre controlador ¿lo que toda mujer desea? Bueno después de este triunfo mediático la literatura erótica revivió con fuerza.
La escritora estadounidense Raine Miller es la autora de la trilogía “El affaire de Blackstone”, que comienza con Desnuda, continúa con Todo o Nada y Sorprendida, al parecer habrá un cuarto libro del cual aún no hay nombre oficial. Y sorprendida estoy del éxito que ha tenido y que continúe siendo publicado, porque a mi realmente no me gustó tanto.
Como muchas lectoras, tras terminar Cincuenta Sombras de Grey, busque más obras del tipo erótico, encontrando Desnuda que prometía superar la historia de Cristhian Grey y Anastasia, pero bueno me parece que la escritora tomo la idea del sexo y palabras vulgares para llevar a su protagonista a lugares ¿desconocidos? O es que termina siendo que el relato erótico no es realmente lo mío y Cincuenta Sombras de Grey fue la excepción a la regla.
Desde el principio no me agrado mucho el personaje principal Brynne Bennet, quien es supuestamente totalmente difícil de conseguir para el codiciado soltero Blackstone, cuando lean el libro se darán cuenta que después de todo el señor nunca tuvo la situación tan difícil.
A diferencia de Cincuenta Sombras, Desnuda transcurre en la ciudad de Inglaterra justo cuando se van a realizar los Juegos Olímpicos. Ethan Blackstone el hombre sombrío y controlador de esta historia, tiene a su cargo una empresa en la que la seguridad de los asistentes más importantes está a su cuidado. Sin embargo la llamada de un viejo adversario en juegos de póker, hace que Blackstone se encargue de la seguridad de su hija quien posa desnuda para varios artistas como terapia para superar sus traumas juveniles y pagar sus estudios de arte.
Ambos personajes tienen un pasado que continua afectando su presente, mientras la estadounidense Brynne Bennet, atraviesa el océano para escapar de todo lo que paso en su juventud; Ethan no sabe cómo superar su trauma después de haber participado como soldado en una guerra y las pesadillas lo asedian constantemente.
La crítica le ha dado buenas calificaciones y la compara con Cincuenta Sombras de Grey dicen que lo supera, hay quienes señalan que la historia es muy floja y carente de tema, en este equipo me apunto ¡yo!, pues encuentro que existe una obvia inspiración en la obra con la que se quiere comparar, pues hasta en el segundo libro lo dice cuando hace referencia al magnate de 27 años sadomasoquista de un libro que están leyendo las mujeres, esta reseña en pleno libro me hizo bajar estándares respecto a él.
Desnuda es narrado por la protagonista, quien debido a su pasado debe ser protegida por este magnate de la seguridad en Londres, en cuya lista de clientes figura la Reyna de Inglaterra. Y debo decir que no entendí a Brynne, no la comprendí, no me identifique con ella y definitivamente se me hizo demasiado ¡mustia! (bueno ya sé que no significa lo que quiero decir, pero ya saben que aquí en México lo aplican para aquella persona que finge ser muy bien portada y después resulta que es todo lo contrario) eso de que a la segunda cita ya es el amor de mi vida, ¡no me impacto! más considerando el traumático pasado de la joven.
Ethan Blackstone, se encarga de narrar el segundo libro y a decir verdad, a pesar de su forma vulgar de expresarse en las situaciones intimas, me llego a caer muy bien. No es un personaje que llegara a amar como en el caso de otros libros, pero es uno que probablemente sería un muy buen amigo mío. Me dio un respiro que me permitió seguir y terminar la segunda entrega.
Al ser el hombre el que narra, la autora utiliza un pensamiento diferente, haciendo la historia un poco más coherente. Me encanto escuchar lo que el protagonista varonil tenía que decir respecto a lo que le atraía de la chica, por lo cual termine de leer de muy buena gana, sin sentirme presionada como con Desnuda.
La escritora da un respiro y satisface muy bien los deseos de las lectoras en esta entrega. Hizo que encontrara a Ethan muy varonil, con una personalidad impactante. Pero ¡me mato! cuando menciono Cincuenta Sombras de Grey en su propio libro. Primer punto no venía al caso y segundo punto desde que arrancan las sinopsis de sus libros comienzan las comparaciones, para mí en un libro debe fluir la inspiración de donde procede, debe sentirse en las palabras y en la estructura, no debe decirse literalmente. Siento que se agarra del éxito de su antecesora, para acaparar público.
El tercer libro Sorprendida, es una mezcla entre los pensamientos de Brynne que narra algunos capítulos y Blackstone, el pasado de la protagonista llega, ahora si más presente que nunca antes y trata de volver a contactarse con ella, esos traumas juveniles que les dije al principio tienen nombre y poder.
Más personajes aparecen en este libro, pero explora muy poco en ellos. En esta entrega la acción va lenta pero muy lenta. No me ha dejado ni con un mal, ni con un buen sabor de boca, pero tampoco con muchas ganas de emprender el siguiente libro. Cada libro consta de aproximadamente 200 paginas, pero ¡que tediosas paginas he leído!
Si gustan del estilo erótico les puedo comentar que leí el primer libro de una nueva saga titulado “Un matrimonio solo de nombre” (en inglés The Marriage Bargain) de la escritora Jennifer Probst, quien tiene una serie de cuatro libros. Erótica si, coherente también, los personajes se me han hecho muy reales y sin extremas dificultades, algo muy agradable para leer. En otra columna ahondare en ellos con más detalle, pero bueno si no les gusta Desnuda, aquí hay algo que pueden comenzar a leer.
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