viernes, 22 de mayo de 2015

Un cafecito con Roberto Calva Cabrera.


Por Orlando Segura Hervert. 
El candidato a la diputación federal por el distrito 03, del Movimiento Ciudadano, Roberto Calva Cabrera, ha mejorado sustancialmente el discurso y desenvolvimiento ante el público y los reporteros, a diferencia del primer día de campaña, expone sus opiniones e ideas con mayor soltura. 

Confiesa: “en la elección pasada del 2013 apoyó y votó por Jorge Vera Hernández, pero desde su muy particular punto de vista, el legislador local no ha hecho absolutamente nada por los alamenses, ni él diputado panista, ni el diputado federal priista, Genaro Ruiz Arriaga hicieron algo por los productores del municipio de la naranja”. 

¿Si Jorge Vera no ha hecho nada, porque siguen votando por él y por el PAN?, el entrevistado sostiene y responde: “porque los electores no han abierto aún los ojos, pero ya es hora de generar el cambio”.

Se siente inconforme con las políticas tradicionales aplicadas, no hay adecuadas respuestas ni gestiones de los representantes populares, esta es otra de las tantas razones del porque aceptó la invitación para participar.

Dice hablar el mismo “lenguaje” de los productores, entiende sus preocupaciones, luego cuestiona el que desde hace 20 años están tratando de alcanzar la certificación del producto y no lo logren. Se da el caso de que los estados norteños cuenten con certificados “patito” y de esta manera puedan comercializar la naranja en el mercado nacional y regional, hay competencia desleal, e inclusive el cítrico llega con larva a estas tierras, esto indudablemente afectará a todo un sector. 

Fumigan cuando no hay naranja, no lo hacen de manera focalizada, solo cubren 10 mil hectáreas y dejan 50 mil sin aplicar este tipo de medidas, desperdician millones de pesos, y no resuelven ni solucionan la sanidad vegetal de esa zona. Critica las deplorables condiciones del centro de acopio del Ídolo, es uno de los más grandes y sin embargo carece de los servicios básicos, ahí se movilizan 8 mil toneladas diarias de naranja. 

Los gobiernos se han olvidado del campo, no hay reales apoyos para la citricultura y la ganadería, los subsidios no llegan o no existen. 

Es indispensable reactivar la economía, revisar la reforma fiscal: “no es posible que no puedas vender un caballo porque hay que estar dado de alta, expedir factura”... 

En sus recorridos por Tuxpan, dos cosas le han llamado la atención:1.- la falta de luz del mercado “Héroes del 47”, a unos pasos del centro de la ciudad 2.- Deficiencias en infraestructura escolar en Tierra Blanca. 

Propone modificar las reglas de operación y transformar la aplicación de los programas federales, menciona a SAGARPA, en donde un día abren las ventanillas y al siguiente la cierran, bajo tal esquema es imposible cubrir los requisitos. 

Los electores le han externado la preocupación por la privatización del agua, es un derecho al que todos tienen derecho. 

La economía está estancada, afirma el candidato del Movimiento Ciudadano, no hay empleo, se dan casos y se ha encontrado con ingenieros agrónomos, egresados de la Universidad de Chapingo, se dedican a otra cosa y no aplican lo que aprendieron en el nivel universitario; sugiere crear alternativas que surjan de la tecnificación del campo para elevar la productividad.

Desde su experiencia señala que el gobierno no ha enseñado a producir a los hombres y mujeres del área rural, solo a comer, así les conviene y por eso siguen con esa política. Además prefieren importar granos, ejemplifica: el frijol proviene de Michigan, el maíz de Brasil, y así sucesivamente.

En las rancherías ya no se producen nada, el colmo de las cosas, sus habitantes acuden a la zona urbana a comprar huevo, tomate, verduras, ahí está la tierra pero no la utilizan ni siquiera para lo indispensable. 

Calva Contreras es originario de Álamo y califica la gestión panista de Álamo como mala, igual que cuando estaban los del PRI. Sin infraestructura, sin caminos a las huertas, en tiempos de lluvias no se puede entrar a las parcelas, no hay diferencia entre uno y otro.

Como ejidatario, citricultor y ganadero, está convencido, el campo con buenas políticas es la solución a la problemática del país. 

Los jóvenes son rebeldes por naturaleza, pero también apáticos, no los ha convencido nadie. 

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