Sapos y Alacranes
Por Orlando Segura Hervert.
Provengo de la izquierda desde 1979 e ingresé a Morena en 2010, cuando apenas era una expresión política en el PRD; en el 2013 al igual que muchos mexicanos, creímos en el discurso y proyecto, quizás tales conceptos en términos generales esten bien diseñados, pero la forma y manera en que están incorporando a infinidad de elementos para que enarbole las nobles causas cuestionan y aceleran el proceso de descomposición en el que está inmerso ese organismo de transformación social.
Morena nos pide lealtad, disciplina y honestidad, exige sumisión y docilidad ante las decisiones erradas de su dirigencia estatal presidida por Manuel Huerta Ladrón de Guevara y la Comisión Nacional de Elecciones; usa a sus militantes y simpatizantes solo para acaparar votos, pero excluye a los sectores vulnerables, los segmentos mas golpeados de la población, castiga la capacidad y el liderazgo, lamentablemente premia la deshonestidad, las actitudes grupales que le obedecen ciegamente y le reiteran ¡Si Sr. Presidente!
Huerta Ladrón de Guevara es un caballo de Troya, cuya actuación es dividir la fuerza real de los morenos en los distritos, está aplicando la misma estrategia de Rogelio Franco Castán en el 2007, cuando se encargó de destruir a la izquierda.
El 5 de enero del año en curso, avalaron la propuesta de José Manuel Pozos Castro, un personaje que ha recorrido varios partidos, desde el PRI, el Partido Revolucionario Veracruzano, el Partido Acción Nacional, de este último, no ha renunciado, así lo constata el padrón proporcionado por la militancia del mismo PAN y del Instituto Nacional Electoral.
Pozos Castro no tiene buena relación e imagen con la sociedad, lo dicen las extrabajadoras de la Termoeléctrica "Adolfo López Mateos", porque abusó de su poder como secretario general de la sección 55 del SUTERM, también lastimó con su nefasto proceder a los taxistas, así es que de donde deducen los dirigentes estatales de Morena y del PT que todo mundo lo quiere y adora. Taxistas y trabajadoras electricistas lo hicieron morder la pólvora de la derrota en1997.
Los morenos siempre se han destacado por la mística, sudar la camiseta, caminar por barrios y colonias aún sin recursos, pero ahora, les colocaron un lastre, una enorme piedra representativa de la soberbia, la prepotencia y la antidemocracia, todo lo contrario de los valores que enarbola Morena en el papel.
Ante tal circunstancia y otras cuestiones que me ha tocado identificar, con las que no comulgo, Me Voy de Morena, buscaré otras trincheras de lucha, otras formas de participación, contribuiré en la construcción del cambio desde otros foros e instancias.
Los 52 millones de pobres, el 6 por ciento de discapacitados a nivel nacional y los periodistas golpeados y asesinados nos siguen reclamando que levantemos la voz, para que se les haga justicia. En síntesis hay mucho por hacer, mas allá de la vida partidista.
El primer domingo de julio del 2018, refrendaré mi compromiso: AMLO SI, y haré la diferenciación en las opciones electorales: Pozos Castro No.
Agradezco a los morenos de Tuxpan el apoyo y respaldo que me dieron, contra ellos nada.
También al equipo de Barzón Federación, mi afecto y abrazo fraterno.
POSDATA: Habría que preguntarle al hijo de Pozos Castro si apoyará el proyecto de su padre o se quedará en el Partido Acción Nacional.
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