sábado, 31 de marzo de 2018

El grato recuerdo de Fidel Castro en Tuxpan en 1988



Sapos y Alacranes
Por Orlando Segura Hervert
En los primeros días de diciembre de 1988 Tuxpan recibe la grata visita de Fidel Castro Ruz, su estancia fue breve, en aquel entonces ingresó a las instalaciones del Museo México Cuba, ahí, la Sra Hilda Bravo Bonilla se las ingenia para colocarse al frente de la comitiva, presurosa y por iniciativa prpia tomó unas flores y a su vez, cuando iba pasando el Comandante, se las proporcionó, ahí aprovechó los breves instantes en que saludó al revolucionario y líder de aquel gran movimiento, en medio de la algarabía y la multitud le pidió la gorra que traía puesta el dirigente de la isla caribeña. 

Castro Ruz le dijo que en ese instante no podía hacerlo porque era la única que traía puesta, pero le pidió los datos, la dirección en Santiago de la Peña y en la próxima Semana Santa, elementos del consulado cubano tocaban la puerta y dotaban del objeto tan entrañable para Doña Hilda.

Carlos Lozano Medrano guarda gratos momentos de aquel pasaje histórico, con emoción cuenta esa parte de un capítulo que a ellos como familia les ha tocado vivir, dijo que su cuñada, ya no radica aquí, desde hace varios años se trasladó a los Estados Unidos, pero con cariño guarda ese pasaje que le tocó presenciar en ese pedacito de tierra en donde alguna vez se resguardara el Yate Granma, la embarcación en la que partieron 82 expedicionarios, aventureros, soñadores que pensaban expulsar al dictador Fulgencio Batista. 

De esta parte del territorio veracruzano, zarparon rumbo a la isla caribeña, cargados de ilusiones un 25 de noviembre de 1956.

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