Sapos y Alacranes
Por Orlando Segura Hervert
Lo que debió resolverse mediante el diálogo y acuerdos entre las partes, está terminando en un conflicto de inciertas conclusiones, perjudicando el buen nombre y prestigio del Instituto Tecnológico de Cerro Azul.
A finales del mes de enero, varios estudiantes decidieron tomar la escuela, por los presuntos malos manejos de los recursos de la institución, cero apoyos para la vida académica, el deporte y la cultura. En los primeros días de abril, el director Heriberto Herrera Cecia, decide expulsar a varios alumnos, el día 5 del presente mes, los estudiantes solicitan mediante un amparo ante el Juzgado Octavo de Distrito, la protección de la justicia y de sus derechos constitucionales, entre otros, argumentaron que ya se encontraban en los últimos semestres para concluir la carrera.
El tribunal en cuestión concedió la suspensión provisional y ordenó que una vez cumplido los requisitos y pago de inscripción nuevamente se les incorpore en la matrícula escolar.
Sin embargo, Heriberto Herrera se niega a cumplir con el fallo judicial, hizo caso omiso del asunto y hasta el momento se comporta como el "Tío Lolo y se hace tarugo solo", lo que se convierte en desacato a la autoridad.
Herrera Cecia, tendrá que acatar la instrucción, so pena de que lo destituyan e inclusive de que pise la cárcel, dicen la abogada de los jóvenes que están aprendiendo por la vía constitucional a defender sus derechos.
Ahora la pelota está del lado del funcionario educativo, de como se comporte, saldrá mal o bien librado de la encrucijada que las circunstancias le ponen.
Abran sus apuestas. Por lo pronto los alumnos continuarán haciendo uso del marco legal que la vida les ha deparado.
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