Tras décadas de desorden en el mercado de los ferris, la Cámara de Senadores establecerá nuevas reglas del juego mediante una iniciativa de reforma a la Ley de Navegación encaminada a regular el servicio de transporte marítimo que se realiza en embarcaciones de corta distancia o cabotaje entre litorales.
Las navieras que operan ferris llevan años tratando de buscar el equilibrio, mientras algunas se convirtieron en compañías dominantes que acabaron con la competencia en regiones como Quintana Roo, donde la Naviera Ultramar fue beneficiaria de políticas de gobernadores y, de autoridades de portuarias y reguladoras, desde los tiempos del ex presidente Ernesto Zedillo.
Sin embargo, la pandemia de COVID-19 ha acelerado la transición hacia un nuevo esquema de operación para el transporte marítimo de cabotaje que podría entrar en vigor antes de que termine 2020, una vez que se apruebe un nuevo marco legal en el Congreso.
Para ello el grupo parlamentario de Morena que encabeza Ricardo Monreal, ha inscrito una iniciativa de reforma a la Ley de Navegación y Comercio Marítimo en su Agenda Legislativa, en el itinerario del periodo ordinario de sesiones del Congreso iniciado ayer con la recepción del 2º informe de Andrés Manuel López Obrador.
En el apartado séptimo sobre Economía y Sistema Financiero, el partido del gobierno en el Senado, registró la “Reforma a la Ley de Navegación y Comercio Marítimo, en materia de regulación de tarifas en la prestación de servicios de trasporte marítimo de pasajeros”.
La reestructuración legal además será acompañada por una “Reforma a la Ley Federal de Competencia Económica, para que cuando se trate de precios máximos fijados por el Estado para bienes y servicio de consumo popular, la Cofece emita opiniones posteriores”.
Datos de secretarios parlamentarios indican que la regulación se dirigirá al otorgamiento de concesiones sobre las rutas marítimas como ocurría hasta antes de 1993, con el fin de que la autoridad intervenga en situaciones delicadas para el mercado así como en la resolución de controversias.
La propuesta parlamentaria llega después de que el transporte marítimo en litorales de Quintana Roo., hiciera crisis debido al aumento generalizado de tarifas ocasionado por el desplome del pasaje entre las islas de Cozumel, Playa del Carmen, Isla Mujeres, Puerto Cancún y Calica, mientras subía el costo de operación de las embarcaciones por pasajero.
Las navieras de ferris de carga y pasaje fueron arrastradas por los efectos de la pandemia, debido a la caída del turismo en la región de Cancún y por la suspensión del arribo de cruceros a Cozumel, que proporcionaba más del 80% de ocupación de los asientos en las embarcaciones hacia Cancún e Isla Mujeres.
A ello se sumaron los altos costos de puerto de la Administración Portuaria Integral de Quintana Roo., que encabeza Alicia Ricalde, que pese a la pandemia siguió presionando pagos a las navieras y no instrumentó un plan de ayudas que permitiera a los habitantes de las islas seguir trasladándose a bajo costo, mientras el aforo en los ferris caía hasta un 90%.
Las principales regiones con operaciones de transporte marítimo de corta distancia son Quintana Roo y, Mazatlán que conecta a diversos puntos de Baja California. En ambas regiones los ferris tienen una vocación básica para el transporte de mercancías, materias primas, pasajeros locales, así como para el turismo...ENVIADO A VAXTUXPAN
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