El sobrepeso y la obesidad continúan siendo un grave problema de salud pública, y así se mantendrá hasta que la población adopte e incorpore de forma definitiva la alimentación sana y correcta, así como la práctica de actividad física diaria, advirtió Luz María Trujillo Meza.
Como parte de las estrategias para abatir esta enfermedad se sugiere que los alimentos se cocinen al vapor, asados, a la plancha, hervidos o al horno. Evitar freír, capear o empalizar; y utilizar aceites de origen vegetal. Lo que se busca es promover una buena alimentación combinada con ejercicios.
Con este escenario de sobrepeso y obesidad, el papel del dietista y /o nutriólogo ocupa un lugar importante para que la población aprenda a modificar sus hábitos alimenticios y logre un sano equilibrio entre lo que consume y su actividad física.
Se recomienda utilizar la extensa variedad de platillos con lo que cuenta la cocina mexicana, que es una de las más completas por su alto valor nutricional.
Dijeron que en los últimos años ha bajado el consumo de frutas y verduras entre la población, debido a la preferencia por comidas rápida.
Aseguraron que la ingesta de alimentos con alto contenido en grasa, carbohidratos y azúcares, provoca el desarrollo de padecimientos como obesidad, diabetes, algunos tipos de cáncer, hipertensión arterial, infartos y enfermedad vascular cerebral, entre otros.
Externaron que el estilo de vida actual de la gente es cada vez más sedentario, su gasto energético es menor y ello agrava los problemas de salud relacionados con la nutrición.
Destacaron que una correcta alimentación debe ser adecuada a las condiciones de las personas conforme a edad, sexo y actividad física. Un buen platillo debe incluir verduras y frutas; cereales y leguminosas y alimentos de origen animal que conformen un menú variado, completo, suficiente y equilibrado.
Añadieron que a esto hay que agregar caminatas de 10 a 30 minutos después de la comida o una actividad doméstica como lavar trastes, barrer y evitar hacer sobremesa, acostarse, beber alcohol, fumar, consumir golosinas; así como no comer entre comidas.
Como parte de las estrategias para abatir esta enfermedad se sugiere que los alimentos se cocinen al vapor, asados, a la plancha, hervidos o al horno. Evitar freír, capear o empalizar; y utilizar aceites de origen vegetal. Lo que se busca es promover una buena alimentación combinada con ejercicios.
Con este escenario de sobrepeso y obesidad, el papel del dietista y /o nutriólogo ocupa un lugar importante para que la población aprenda a modificar sus hábitos alimenticios y logre un sano equilibrio entre lo que consume y su actividad física.
Se recomienda utilizar la extensa variedad de platillos con lo que cuenta la cocina mexicana, que es una de las más completas por su alto valor nutricional.
Dijeron que en los últimos años ha bajado el consumo de frutas y verduras entre la población, debido a la preferencia por comidas rápida.
Aseguraron que la ingesta de alimentos con alto contenido en grasa, carbohidratos y azúcares, provoca el desarrollo de padecimientos como obesidad, diabetes, algunos tipos de cáncer, hipertensión arterial, infartos y enfermedad vascular cerebral, entre otros.
Externaron que el estilo de vida actual de la gente es cada vez más sedentario, su gasto energético es menor y ello agrava los problemas de salud relacionados con la nutrición.
Destacaron que una correcta alimentación debe ser adecuada a las condiciones de las personas conforme a edad, sexo y actividad física. Un buen platillo debe incluir verduras y frutas; cereales y leguminosas y alimentos de origen animal que conformen un menú variado, completo, suficiente y equilibrado.
Añadieron que a esto hay que agregar caminatas de 10 a 30 minutos después de la comida o una actividad doméstica como lavar trastes, barrer y evitar hacer sobremesa, acostarse, beber alcohol, fumar, consumir golosinas; así como no comer entre comidas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario