Qué fácil es decir terminamos un año más, pero que difícil saber si lo vivimos en realidad
Se vive cuando se disfruta cada paso de nuestro andar, secando lágrimas y haciendo sonreír a los demás.
Se vive cuando se abrazan los momentos felices y de tristeza, siendo todos, parte de la realidad
Aprendiendo de los errores, pidiendo perdón y aprendiendo a perdonar.
Qué fácil es decir que llegamos a la recta final, cuando en realidad desconocemos si cumplimos con los objetivos marcados en cantidad.
Cada minuto, cada día y cada año tienen un significado particular, ninguno es igual cuando existen proyectos por alcanzar.
Qué fácil es dar gracias por un año más, pero que difícil nos resulta expresar sentimientos a diario, siendo conscientes de que la vida no es nuestra y es tan libre que en cualquier momento puede volar.
Se vive cuando se ama desinteresadamente, haciendo de cada persona algo especial
Se vive cuando no se espera nada a cambio de lo que se da, cuando las palabras y las acciones salen del corazón y no de una mente que es experta en engañar.
Se vive cuando te vas liberando de lo material y eres apto para amar lo espiritual, cuando tus proyectos de riqueza no perjudican a nadie más, cuando dejas respirar en ti un aire de humildad y cuando te sientes dueño de ti, solo de ti y de nadie más
Qué fácil es agradecer a Dios por un año más y acordarte de él solo en ese momento y en los de gran dificultad, cuando no ignoras que siempre contigo está.
Hoy puedes hacer el cambio, la diferencia, fijarte metas en el corazón, cosas alcanzables y que puedas cumplir y realizar, recordando que se vive intensamente, cuando se aprovecha el don de respetar, ayudar y hacer felices a los demás.
Se vive cuando se disfruta cada paso de nuestro andar, secando lágrimas y haciendo sonreír a los demás.
Se vive cuando se abrazan los momentos felices y de tristeza, siendo todos, parte de la realidad
Aprendiendo de los errores, pidiendo perdón y aprendiendo a perdonar.
Qué fácil es decir que llegamos a la recta final, cuando en realidad desconocemos si cumplimos con los objetivos marcados en cantidad.
Cada minuto, cada día y cada año tienen un significado particular, ninguno es igual cuando existen proyectos por alcanzar.
Qué fácil es dar gracias por un año más, pero que difícil nos resulta expresar sentimientos a diario, siendo conscientes de que la vida no es nuestra y es tan libre que en cualquier momento puede volar.
Se vive cuando se ama desinteresadamente, haciendo de cada persona algo especial
Se vive cuando no se espera nada a cambio de lo que se da, cuando las palabras y las acciones salen del corazón y no de una mente que es experta en engañar.
Se vive cuando te vas liberando de lo material y eres apto para amar lo espiritual, cuando tus proyectos de riqueza no perjudican a nadie más, cuando dejas respirar en ti un aire de humildad y cuando te sientes dueño de ti, solo de ti y de nadie más
Qué fácil es agradecer a Dios por un año más y acordarte de él solo en ese momento y en los de gran dificultad, cuando no ignoras que siempre contigo está.
Hoy puedes hacer el cambio, la diferencia, fijarte metas en el corazón, cosas alcanzables y que puedas cumplir y realizar, recordando que se vive intensamente, cuando se aprovecha el don de respetar, ayudar y hacer felices a los demás.
Fraternalmente: Tere Quintanilla..
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