Primera Parte
Fernando Pérez del Castillo.
La victoria del PRI parecía inevitable, y lo que nunca entendió la cúpula panista, que también era posible evitarla; por supuesto que implicaba cambiar ciertos usos y costumbres, que lenta pero inexorablemente llevaron al PAN a la situación actual. Hoy solo hablaré de uno de ellos: La ambición personal.
La Presidenta del PAN, Hortensia Villalba Pérez de Bautista, fiel a su costumbre esta buscando culpables, pero....que tal si comenzamos con ella. Ella sacó su cuenta y se dijo: vamos a perder pero 4 regidores si vamos a tener, así que...va mi hijo. Una vez que lo impuso en la planilla, en la campaña ni se apareció. Tuvo un dolor permanente de cabeza.
Esta Familia Bautista, viene viviendo del presupuesto desde los años ochenta del siglo pasado, cuando el fundador de esta pandilla Julian Bautista fue regidor, después su hijo Gustavo, le siguió su hijo Antonio, 2 veces, continuó la rapiña con Hortensia Villalba, la nuera, esposa de Antonio, y afortunadamente el pueblo,en su infinita sabiduría, paró este pillaje y no dejó llegar al nieto e hijo de Antonio y Hortensia, el joven de muy buenos recuerdos en Puerto Pesquero: Antonio Bautista Villalba. Hortensia, con esta primera y ambiciosa decisión personal, dividió a la militancia y le dio la primera puñalada a la posibilidad de ganar.
La estructura electoral de cuidado del voto, también se vio afectada por esta seudo política. Sus comadres, compadres, ahijados, sobrinos, tíos, etc, conformaron el equipo de defensa del voto, cuya única virtud era ser recomendados de Hortensia. Hasta su esposo Antonio Bautista, cariñosamente llamado tontoño, fue representante general. Con este bajísimo perfil de defensores, le aplicó la segunda puñalada a los candidatos.
Esta familia, Los Bautista, acostumbrada a exprimir a los candidatos, al ver que que no podrían beneficiarse como siempre lo han hecho, se dedicaron a denostar a Vicente Muñoz y a María Teresa Osorio, promoviendo la división en los equipos de trabajo, llegando incluso a provocar, que para que medianamente pudieran hacer una campaña digna, los candidatos tuvieron que crear un Comité alterno al de la Presidenta. Con esta conducta egoísta y tendenciosa, le asestó la tercera puñalada.
Sus problemas legales, resueltos con una solución política que le amarraba las manos, su desbordada ambición ligada a su necesidad económica de seguir en el presupuesto, su ignorancia, su irresponsabilidad al aceptar un cargo para el cual está mentalmente impedida, hacen de Hortensia Villalba Pérez de Bautista, sin duda, una de los principales protagonistas en la derrota del PAN.
Fernando Pérez del Castillo.
La victoria del PRI parecía inevitable, y lo que nunca entendió la cúpula panista, que también era posible evitarla; por supuesto que implicaba cambiar ciertos usos y costumbres, que lenta pero inexorablemente llevaron al PAN a la situación actual. Hoy solo hablaré de uno de ellos: La ambición personal.
La Presidenta del PAN, Hortensia Villalba Pérez de Bautista, fiel a su costumbre esta buscando culpables, pero....que tal si comenzamos con ella. Ella sacó su cuenta y se dijo: vamos a perder pero 4 regidores si vamos a tener, así que...va mi hijo. Una vez que lo impuso en la planilla, en la campaña ni se apareció. Tuvo un dolor permanente de cabeza.
Esta Familia Bautista, viene viviendo del presupuesto desde los años ochenta del siglo pasado, cuando el fundador de esta pandilla Julian Bautista fue regidor, después su hijo Gustavo, le siguió su hijo Antonio, 2 veces, continuó la rapiña con Hortensia Villalba, la nuera, esposa de Antonio, y afortunadamente el pueblo,en su infinita sabiduría, paró este pillaje y no dejó llegar al nieto e hijo de Antonio y Hortensia, el joven de muy buenos recuerdos en Puerto Pesquero: Antonio Bautista Villalba. Hortensia, con esta primera y ambiciosa decisión personal, dividió a la militancia y le dio la primera puñalada a la posibilidad de ganar.
La estructura electoral de cuidado del voto, también se vio afectada por esta seudo política. Sus comadres, compadres, ahijados, sobrinos, tíos, etc, conformaron el equipo de defensa del voto, cuya única virtud era ser recomendados de Hortensia. Hasta su esposo Antonio Bautista, cariñosamente llamado tontoño, fue representante general. Con este bajísimo perfil de defensores, le aplicó la segunda puñalada a los candidatos.
Esta familia, Los Bautista, acostumbrada a exprimir a los candidatos, al ver que que no podrían beneficiarse como siempre lo han hecho, se dedicaron a denostar a Vicente Muñoz y a María Teresa Osorio, promoviendo la división en los equipos de trabajo, llegando incluso a provocar, que para que medianamente pudieran hacer una campaña digna, los candidatos tuvieron que crear un Comité alterno al de la Presidenta. Con esta conducta egoísta y tendenciosa, le asestó la tercera puñalada.
Sus problemas legales, resueltos con una solución política que le amarraba las manos, su desbordada ambición ligada a su necesidad económica de seguir en el presupuesto, su ignorancia, su irresponsabilidad al aceptar un cargo para el cual está mentalmente impedida, hacen de Hortensia Villalba Pérez de Bautista, sin duda, una de los principales protagonistas en la derrota del PAN.
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