Por: Martha Cruz
Imágenes: Orlando Segura Hervert
Tuxpan, Ver.- En el tradicional desfile del 01 de mayo “Día del Trabajo” prevaleció el pesar, en señal de solidaridad por los muertos en Coatzacoalcos y los taxistas muertos en el municipio.
“Seguimos llorando a nuestros amigos”, así fue como el Secretario General del Sindicato de la Industria de la Radio y la Televisión STIRT sección Tuxpan – Álamo, René Rojas Alvarez, inició la lectura del manifiesto leído, durante el inicio del tradicional desfile de los trabajadores, destacó que no sólo Coatzacoalcos está de luto, sino todos los trabajadores de Veracruz.
Con este desfile no solo se honra a los mártires de Chicago, Cananea y Río Blanco asesinados por demandar los derechos que hoy forman parte de la legislación laboral, en esta ocasión se marchó en señal de luto y solidaridad de los veracruzanos que lloran el deceso de sus obreros.
“ La tragedia fue el 20 de abril, donde la corrupción mató a nuestros compañeros trabajadores, pues con tal de ahorrar a la empresa unos pesos, los cuales debieron ser invertidos en el mantenimiento de las instalaciones, la corrupción género este dolor que ha lastimado a los veracruzanos, ante esta tragedia se espera la respuesta de los senadores y diputados para que la empresa Mexichem sea castigada”.
Posterior a la lectura del manifiesto, los secretarios generales de las diferentes confederaciones, federaciones y sindicatos encabezaron el tradicional desfile.
Durante el desarrollo de esta marcha se pudieron leer pancarta con consignas, donde se exigía a las autoridades respeto a los contratos colectivos de trabajo, más fuentes de empleo, seguridad, entre otras consignas.
Es de mencionar que los grandes ausentes fueron el Sindicato de PEMEX, SUTERM sección 55, CNOP, CCI, entre otros sindicatos.
Lo que llamó la atención fue la presencia de contingentes de los municipios de Álamo, Ixhuatlán de Madero, Cerro Azul y Naranjos.
Los maestros de la sección 56 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, rompieron con la docilidad y el férreo control de los obreros cuando exigieron el pago de pensiones y jubilaciones puntuales, en ese sentido gritaban la consigna: ¡Duarte ratero, devuélvenos el dinero!, una inmensa minoría, su voz casi no se escuchó ante los gremios acostumbrados a la disciplina como los profes del Equipo Político de la sección 32, contrarios a la rebeldía.
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