POR: ELIAS CRUZ
Calientito terminó el partido entre los conejos de Tuxpan y los Tiburones Rojos de Boca del Río cuando el director técnico del cuadro rojo Arturo Aviles empezó a reclamar enérgicamente a los jugadores de conejos por las faltas cometidas durante el encuentro, esto trajo como consecuencia que se calentaran los ánimos y jugadores de ambos lados intercambiaban empujones y uno que otro golpecito, finamente el juez central tranquilizó el ambiente y el duelo finalizó a favor para Conejos que se impusieron a Tiburones por dos a uno y con ello le rompen una racha de partidos ganados para el equipo de Boca del Río.
La primera anotación fue muy tempranera que sorprendió a tiburones y le cambió todo el esquema, al minuto de juego Jonathan Chávez puso a la tribuna a vibrar y con ello enfilar la victoria, después al minuto 16 reaccionaron los visitantes por conducto de Edgar Lara situación que calmó a la afición, sin embargo los conejos siguieron con su juego ofensivo y en un contragolpe con el portero fuera de su área chica Edgar Cruz bombeo el esférico sin dejar una posible reacción del arquero y el balón cayó en las redes y con esto Tuxpan se fue adelante, ventaja que nunca iba a perder.
Este juego corresponde a la jornada doce del torneo clausura 2008, cabe hacer mención que los Conejos sorpresivamente estrenaron director técnico el cual es Juan Humberto Muñoz Gómez, no obstante el club fue totalmente dirigido en este encuentro por Bruno Benito González quien en la de cedula de juego aparece como el auxiliar técnico que hasta antes de este juegos había estado de manera interina a cargo del equipo verde.
Casi al final del cotejo, tras una jugada de producto de gallina en el medio campo se calentaron los ánimos, pues la impotencia de parte del equipo de tiburones era tan evidente que cualquier falta la reclamaban enérgicamente, por lo que el conato de bronca estaba muy marcada, así transcurrieron los últimos minutos hasta que el juez central Herlindo Toribio Martínez pitó el final, colegiado que tuvo una buena actuación pues con personalidad llevó el partido y fue pieza clave que evitó escenas de violencia.
Calientito terminó el partido entre los conejos de Tuxpan y los Tiburones Rojos de Boca del Río cuando el director técnico del cuadro rojo Arturo Aviles empezó a reclamar enérgicamente a los jugadores de conejos por las faltas cometidas durante el encuentro, esto trajo como consecuencia que se calentaran los ánimos y jugadores de ambos lados intercambiaban empujones y uno que otro golpecito, finamente el juez central tranquilizó el ambiente y el duelo finalizó a favor para Conejos que se impusieron a Tiburones por dos a uno y con ello le rompen una racha de partidos ganados para el equipo de Boca del Río.
La primera anotación fue muy tempranera que sorprendió a tiburones y le cambió todo el esquema, al minuto de juego Jonathan Chávez puso a la tribuna a vibrar y con ello enfilar la victoria, después al minuto 16 reaccionaron los visitantes por conducto de Edgar Lara situación que calmó a la afición, sin embargo los conejos siguieron con su juego ofensivo y en un contragolpe con el portero fuera de su área chica Edgar Cruz bombeo el esférico sin dejar una posible reacción del arquero y el balón cayó en las redes y con esto Tuxpan se fue adelante, ventaja que nunca iba a perder.
Este juego corresponde a la jornada doce del torneo clausura 2008, cabe hacer mención que los Conejos sorpresivamente estrenaron director técnico el cual es Juan Humberto Muñoz Gómez, no obstante el club fue totalmente dirigido en este encuentro por Bruno Benito González quien en la de cedula de juego aparece como el auxiliar técnico que hasta antes de este juegos había estado de manera interina a cargo del equipo verde.
Casi al final del cotejo, tras una jugada de producto de gallina en el medio campo se calentaron los ánimos, pues la impotencia de parte del equipo de tiburones era tan evidente que cualquier falta la reclamaban enérgicamente, por lo que el conato de bronca estaba muy marcada, así transcurrieron los últimos minutos hasta que el juez central Herlindo Toribio Martínez pitó el final, colegiado que tuvo una buena actuación pues con personalidad llevó el partido y fue pieza clave que evitó escenas de violencia.
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