Orlando Segura Hervert.
Los consumidores desconocen sus derechos, por tal razón no apelan ni protestas, no acuden a PROFECO, no exigen que se les de un buen servicio, aparte de ello en varios puntos del estado o la república no existe la instancia federal para promover la defensa de los intereses de los clientes. De ahí la importancia de fortalecer agrupaciones como la que se han creado en Tuxpan, hay que apoyarlas, porque a través de dichas instancias se puede hacer uso de las herramientas de la normatividad jurídica, declaró el Subdelegado Guillermo Basurto Origel.
El funcionario agrega que durante el 2008, las empresas que mayor número de quejas recibieron por su servicio fueron la Comisión Federal de Electricidad por los altos costos de la luz, en el caso de TELMEX, las inconformidades se redujeron sustancialmente.
Los usuarios presentaron un promedio de 300 solicitudes de intervención de la instancia federal para regular o frenar los abusos de CFE, un gran porcentaje de dicho universo fue por cobros indebidos. En muchos de los casos, la dependencia argumentó mal funcionamiento de los medidores.
De las investigaciones realizadas por la PROFECO, se localizaron varios elementos imputables al consumidor, la colocación de los famosos “diablitos”, dado lo anterior, el cliente se vio en la necesidad de cubrir los adeudos y multas implantadas por la CFE.
Basurto Origen señaló que para el 2009, se establecerán convenios con el área de ingeniería de la Universidad Veracruzana con el propósito de que la máxima casa de estudios pueda verificar los medidores, dado que PROFECO, no cuenta con el instrumental técnico y por lo tanto tiene que confiar en lo que diga y sostenga la CFE. Cuestión que ha sido criticada por los propios clientes, usuarios o consumidores.
Se le pregunta si el procedimiento para obtener una respuesta favorable no es muy tardado y engorroso, a lo que el servidor público responde que el tiempo normal es de dos meses, entre la recepción, las audiencias, conciliatorias y la resolución final
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