Por Uriel Flores Aguayo...
Andrés Manuel López Obrador, es una de las principales figuras públicas de México en, por lo menos, los últimos 16 años; su presencia, sus cargos y sus propuestas han tenido una extraordinaria proyección y han sido motivo de debates nacionales. Se trata de un líder mayor, de grandes dimensiones, que suscita adhesiones cuasi religiosas y odios patológicos; después de su papel en el PRD y en el gobierno del DF las candidaturas presidenciales le llegaron en forma natural. Obrador, conjuga las cualidades anti -sistémicas y libertarias de un luchador social con la vocación de poder de un político diferente: siempre con iniciativa, innovador y con visión social.
Trato a Andrés Manuel, desde hace unos 23 años, en diferentes ocasiones hemos convivido: reuniones, recorridos y comidas; he participado de platicas cercanas con él, de alguna manera lo conozco, siempre me ha parecido una persona sencilla y noble, sin que tales cualidades le resten firmeza. Así como hay quienes lo endiosan también existen aquellos que lo odian por razones sociales, políticas y económicas; no encaja en los paradigmas del político tradicional, ese que se preocupa mas por la fachada y el dinero. Contra AMLO se han cometido injusticias y vilezas desde las elites del poder y sus voceros.
En el 2006 fue victima de un brutal linchamiento mediático y empresarial para que no llegara a la presidencia; ante el fraude convocó a movilizaciones y plantones como el de la “avenida Reforma” del DF que, a la fecha, le recuerdan como uno de sus supuestos mayores errores; la paradoja está en que los supuestos afectados de esa medida, los habitantes del DF, le siguen otorgando su confianza expresada en millones de voto.
En este 2012 nuevamente los poderes facticos, ahora alineados con Peña, han hecho todo lo posible por obstruir la llegada de AMLO a la presidencia. Sin elecciones libres, en la más negativa inequidad y con un árbitro de parapeto están colocando a Peña en la presidencia por medio de un plan bien orquestado y la compra masiva de votos .Ante tanta irregularidad AMLO impugna para recibir, otra vez, una andanada de ataques y burlas. A sus detractores no les gusta ni frio ni caliente: si se moviliza está mal, si acude a las instancias, también.
Las elecciones que acabamos de vivir tienen mucho de simulación o farsa, en esencia son fraudulentas por que no son libres, por que la voluntad popular se distorsiona a partir de la manipulación informativa y el uso del dinero. Las elites del poder tenían dos candidatos, Josefina y Peña, dándole prioridad a este último como producto de un proyecto mediático y la participación de grupos de poder como la cúpula del SNTE, la cadena” Soriana” y el presupuesto del Estado de México. Es curioso que los priistas no celebren su supuesto triunfo, pareciera que dudan de él, que no lo hace suyo y no lo pueden presumir. Si ganara el PRI solamente gana una sigla o un registro legal, no el priismo histórico y de base; ¿gana el PRI? .Si desglosáramos la votación de Peña, encontraríamos que muchos de sus votos provienen del relleno de urnas de zonas aisladas, rurales e indígenas
Los jóvenes, las clases medias, en general los ciudadanos urbanos no creen en Peña, lo están impugnando en forma ostensible y espontánea, es un dato estimulante y nuevo.
Habla muy mal de ciertas elites el odio que le dedican a AMLO, las retrata en su pequeñez; se han ensañado con él al extremo de la ridiculización asesorada por extranjeros y proyectada en medios como TELEVISA. Se les sigue pasando la mano, los enferma su intolerancia y son incapaces de mínimos de objetividad y sentido común. Me indignan esas formas, viles, y me motivan a expresar mi apoyo y respeto a Andrés Manuel, como los 106 mil ciudadanos xalapeños que le dieron su voto en una contundente demostración de confianza y credibilidad el reciente primero de julio.
Recadito: para agradecer e informar a los xalapeños realizo recorridos este viernes, el sábado y el domingo.
Xalapa Enríquez Veracruz 12 Julio 2012
Ufa1959.@gmail.com
Andrés Manuel López Obrador, es una de las principales figuras públicas de México en, por lo menos, los últimos 16 años; su presencia, sus cargos y sus propuestas han tenido una extraordinaria proyección y han sido motivo de debates nacionales. Se trata de un líder mayor, de grandes dimensiones, que suscita adhesiones cuasi religiosas y odios patológicos; después de su papel en el PRD y en el gobierno del DF las candidaturas presidenciales le llegaron en forma natural. Obrador, conjuga las cualidades anti -sistémicas y libertarias de un luchador social con la vocación de poder de un político diferente: siempre con iniciativa, innovador y con visión social.
Trato a Andrés Manuel, desde hace unos 23 años, en diferentes ocasiones hemos convivido: reuniones, recorridos y comidas; he participado de platicas cercanas con él, de alguna manera lo conozco, siempre me ha parecido una persona sencilla y noble, sin que tales cualidades le resten firmeza. Así como hay quienes lo endiosan también existen aquellos que lo odian por razones sociales, políticas y económicas; no encaja en los paradigmas del político tradicional, ese que se preocupa mas por la fachada y el dinero. Contra AMLO se han cometido injusticias y vilezas desde las elites del poder y sus voceros.
En el 2006 fue victima de un brutal linchamiento mediático y empresarial para que no llegara a la presidencia; ante el fraude convocó a movilizaciones y plantones como el de la “avenida Reforma” del DF que, a la fecha, le recuerdan como uno de sus supuestos mayores errores; la paradoja está en que los supuestos afectados de esa medida, los habitantes del DF, le siguen otorgando su confianza expresada en millones de voto.
En este 2012 nuevamente los poderes facticos, ahora alineados con Peña, han hecho todo lo posible por obstruir la llegada de AMLO a la presidencia. Sin elecciones libres, en la más negativa inequidad y con un árbitro de parapeto están colocando a Peña en la presidencia por medio de un plan bien orquestado y la compra masiva de votos .Ante tanta irregularidad AMLO impugna para recibir, otra vez, una andanada de ataques y burlas. A sus detractores no les gusta ni frio ni caliente: si se moviliza está mal, si acude a las instancias, también.
Las elecciones que acabamos de vivir tienen mucho de simulación o farsa, en esencia son fraudulentas por que no son libres, por que la voluntad popular se distorsiona a partir de la manipulación informativa y el uso del dinero. Las elites del poder tenían dos candidatos, Josefina y Peña, dándole prioridad a este último como producto de un proyecto mediático y la participación de grupos de poder como la cúpula del SNTE, la cadena” Soriana” y el presupuesto del Estado de México. Es curioso que los priistas no celebren su supuesto triunfo, pareciera que dudan de él, que no lo hace suyo y no lo pueden presumir. Si ganara el PRI solamente gana una sigla o un registro legal, no el priismo histórico y de base; ¿gana el PRI? .Si desglosáramos la votación de Peña, encontraríamos que muchos de sus votos provienen del relleno de urnas de zonas aisladas, rurales e indígenas
Los jóvenes, las clases medias, en general los ciudadanos urbanos no creen en Peña, lo están impugnando en forma ostensible y espontánea, es un dato estimulante y nuevo.
Habla muy mal de ciertas elites el odio que le dedican a AMLO, las retrata en su pequeñez; se han ensañado con él al extremo de la ridiculización asesorada por extranjeros y proyectada en medios como TELEVISA. Se les sigue pasando la mano, los enferma su intolerancia y son incapaces de mínimos de objetividad y sentido común. Me indignan esas formas, viles, y me motivan a expresar mi apoyo y respeto a Andrés Manuel, como los 106 mil ciudadanos xalapeños que le dieron su voto en una contundente demostración de confianza y credibilidad el reciente primero de julio.
Recadito: para agradecer e informar a los xalapeños realizo recorridos este viernes, el sábado y el domingo.
Xalapa Enríquez Veracruz 12 Julio 2012
Ufa1959.@gmail.com
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