Por: Tere Quintanilla
La oficina distrital de la SAGARPA advierte a todos los citricultores de la región, principalmente a los productores más importantes de la zona: Álamo, Tihuatlán, Cazones y Tuxpan, tomar las medidas necesarias para contrarrestar a la plaga de la mosca de la fruta.
El Jefe de Distrito 02 de la SAGARPA, Heraclio Marini Zavaleta, indicó que los citricultores deben reforzar sus medidas preventivas para combatir la plaga, una de las causantes que limita la venta del producto ante los mercados del norte y centro del país. No tan solo con la plaga deben lidiar los productores.
Por poner un ejemplo la plaga de la mosca de la fruta en el 2011, provocó afectaciones en 70 mil hectáreas de la naranja en los municipios de Tuxpan y Álamo, obviamente fue un golpe muy duro para los productores a sus bolsillos, agregado que la sequía del año pasado lastimó severamente las cosechas, toda vez que no alcanzaron a desarrollarse por falta del vital liquido, para este año aparentemente hay una pequeña esperanza para el sector, toda vez que las últimas lluvias ha permitido que las presas y arroyos mantengan un nivel optimo para abastecer de agua a los cultivos.
Marini Zavaleta, indicó que la citricultura de la región, en los últimos años ha sufrido, tanto así que los propios productores ya se muestran desalentados por ya no producir la misma cantidad de tonelaje, actualmente la producción se está enviando a los mercados de la ciudad de México y Guadalajara, cuando hace muchos años se daban el lujo de exportarlo al extranjero, como Portugal, Japón, Filipinas y países sudafricanos, donde la naranja tiene crecimiento a pocas escalas.
Los productores reconocieron que la naranja se ha vuelto complicada y más cuando se trata de hacer frente a las plagas, La SAGARPA, lleva un control en el manejo de la misma, hasta el momento el nivel de afectación no es muy severo. Sin embargo se mantienen monitoreando las cosechas a fin de actuar oportunamente en caso de encontrar indicios de la plaga.
Entre las recomendaciones básicas se encuentran la fumigación, tratamiento con cloro, fungicidas, fertilización, riego y podas oportunas, esto reduce posibilidades de la mosca de la fruta.
La oficina distrital de la SAGARPA advierte a todos los citricultores de la región, principalmente a los productores más importantes de la zona: Álamo, Tihuatlán, Cazones y Tuxpan, tomar las medidas necesarias para contrarrestar a la plaga de la mosca de la fruta.
El Jefe de Distrito 02 de la SAGARPA, Heraclio Marini Zavaleta, indicó que los citricultores deben reforzar sus medidas preventivas para combatir la plaga, una de las causantes que limita la venta del producto ante los mercados del norte y centro del país. No tan solo con la plaga deben lidiar los productores.
Por poner un ejemplo la plaga de la mosca de la fruta en el 2011, provocó afectaciones en 70 mil hectáreas de la naranja en los municipios de Tuxpan y Álamo, obviamente fue un golpe muy duro para los productores a sus bolsillos, agregado que la sequía del año pasado lastimó severamente las cosechas, toda vez que no alcanzaron a desarrollarse por falta del vital liquido, para este año aparentemente hay una pequeña esperanza para el sector, toda vez que las últimas lluvias ha permitido que las presas y arroyos mantengan un nivel optimo para abastecer de agua a los cultivos.
Marini Zavaleta, indicó que la citricultura de la región, en los últimos años ha sufrido, tanto así que los propios productores ya se muestran desalentados por ya no producir la misma cantidad de tonelaje, actualmente la producción se está enviando a los mercados de la ciudad de México y Guadalajara, cuando hace muchos años se daban el lujo de exportarlo al extranjero, como Portugal, Japón, Filipinas y países sudafricanos, donde la naranja tiene crecimiento a pocas escalas.
Los productores reconocieron que la naranja se ha vuelto complicada y más cuando se trata de hacer frente a las plagas, La SAGARPA, lleva un control en el manejo de la misma, hasta el momento el nivel de afectación no es muy severo. Sin embargo se mantienen monitoreando las cosechas a fin de actuar oportunamente en caso de encontrar indicios de la plaga.
Entre las recomendaciones básicas se encuentran la fumigación, tratamiento con cloro, fungicidas, fertilización, riego y podas oportunas, esto reduce posibilidades de la mosca de la fruta.
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