lunes, 29 de octubre de 2012

EXPEDIENTE 2012


Luis Velázquez

Desde que inventaron los pretextos, algunos de los 30 diputados federales de Veracruz han estado faltando a las sesiones de la Cámara Baja, no obstante que en los días que corren se debatió la reforma electoral, entrará a debate el presupuesto federal 2013 y están listas las iniciativas de ley para las reformas energética, fiscal y educativa.

De acuerdo con la página web del Congreso de la Unión, donde trepan un montón de hechos y circunstancias, y también el listado de asistencia, los siguientes legisladores federales han faltado en varias ocasiones, cierto, y como está escrito, con permiso de la mesa directiva y por cédula, pero con todo, faltistas al fin.

Incluso, la nota apareció primero en el portal alcalorpolítico y luego se retomaron los datos de algunos diputados en el twitter de blog.expediente.mx y Troya ardió.

Por ejemplo, el panista Juan Bueno Torio envió un correo broncudo, altisonante y grosero, cuando en la misma página web del Congreso anota sus faltas.

El mismo caso ocurrió con el diputado del PRD, Uriel Flores Aguayo, cuando sus inasistencias fueron fichadas en la página tecnológica.

Y es que por ningún motivo se justifican (quizá por la muerte de un familiar cercano, los padres, los hijos) las faltas en el Congreso federal, pues, primero, sólo sesionan de vez en vez, y segundo, por eso reciben salario millonario.

La lista de faltistas es la siguiente: Luis Ricardo Aldana Prieto, coordinador de la bancada priista de Veracruz, tesorero perpetuo del sindicato petrolero, yerno del senador Carlos Romero Deschamps, tuvo la primera inasistencia “con permiso de la mesa directiva” el 27 de septiembre.

Verónica Carreón Cervantes faltó el primero de septiembre.

Jorge del Ángel Acosta tuvo la primera inasistencia con permiso de la mesa directiva el 27 de septiembre.

Zita Beatriz Pazzi Masa faltó el 13 de septiembre con permiso de la mesa directiva.

Ponciano Vázquez Parissi faltó los días 2 y 4 de octubre en permiso por cédula.

Juan Bueno Torio faltó el 27 de septiembre con permiso de la mesa directiva y el 4 de octubre tuvo asistencia por cédula, enviando a un chalán.

Mariana Dunyaska García Rojas faltó el 25 de septiembre.

Víctor Serralde Martínez faltó el primero de septiembre con permiso de la mesa directiva.

Uriel Flores Aguayo tuvo una inasistencia por votaciones el 27 de septiembre.

María Guadalupe Moctezuma Oviedo registró inasistencia por votaciones el 27 de septiembre.

Federico José González Luna Bueno faltó el 4 de septiembre con permiso de la mesa directiva y el 27 de septiembre enviando a un represente “como para tapar el ojo al macho”.

Araceli Torres Flores tuvo asistencia por cédula, es decir, envió a un charal a la sesión del 27 de septiembre.

FLACA CABALLADA LEGISLATIVA

Los diputados federales tienen apenas dos meses en la curul y se han ausentado de las sesiones.

Y, bueno, como el reglamento contempla la posibilidad de faltar, ellos aprovechan la coyuntura jurídica.

El hecho resulta peor si se considera lo siguiente: de los 30 diputados federales de Veracruz, sólo dos alcanzaron la presidencia de una comisión: el priista Fernando Charleston Hernández, como presidente de la Comisión de Desarrollo Social y el panista Víctor Serralde, como presidente de la Comisión de Desarrollo Rural.

Y, bueno, el resto, y como la misma ley establece, quedaron en alguna comisión, quizá algunos como secretarios, vocales en todo caso, pero ninguno como titular.

Desde luego, lo anterior habla de la pobreza política, social y legislativa de los diputados federales y sus padrinos, pues quedaron fuera del paraíso.

Todavía peor con sus faltitas.

En el caso de Ricardo Aldana habría de referir que por encima de Veracruz tiene altísima preferencia por el sindicato petrolero, a quien debe todo, incluso, la fama pública de que su riqueza personal es más elevada que la del mismo Carlos Romero Deschamps, su suegro de oro.

Le dieron la coordinación de los legisladores priistas para quedar bien, cierto, con el senador Romero Deschamps, pero Aldana tiene los dos pies metidos en el sindicato petrolero con la esperanza de ser el relevo del suegro en el liderazgo nacional.

Y más todavía por los servicios prestados al PRI, como en la campaña electoral de Francisco Labastida Ochoa, cuando desviaron 8 mil millones de pesos de Petróleos Mexicanos y gracias al director jurídico del partido tricolor de entonces, Miguel Ángel Yunes Linares, evadió la cárcel.

Pero desde entonces, el PRI arrastra una deuda histórica tanto con Romero Deschampos como con Ricardo Aldana.

Veracruz con sus grandes pendientes sociales significa apenas un accidente político en la vida del tesorero del gremio petrolero.

Por eso figura en la lista de faltistas, y por eso mismo seguirá faltando, “con permiso de la mesa directiva”, valiéndole un soberano cacahuate el desarrollo social y económico de los casi 8 millones de veracruzanos.

POSDATA: Más información en elblog.expediente.mx

No hay comentarios: