•Su amigo Jorge Schettino fue enviado como candidato a la alcaldía de su pueblo; pero sólo para exhibir al senador, pues se trataba de una derrota anunciada
•Maquiavelismo de Érick Lagos acatando órdenes superiores
•Está engordando la caballada duartista para el 2016
Luis Velázquez
Desde antes de aceptar la candidatura priista a la alcaldía de Paso del Macho, Jorge Schettino Pérez estaba seguro de la derrota. Así lo anunciaban las encuestas. El sondeo. Las pláticas en el pueblo.
Pero el presidente del CDE del PRI, Érick Lagos, con toda la fuerza política atrás, porfiaba ante tanta resistencia. Incluso, hasta lo obligaron a renunciar a la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, en donde se venía desempeñando como subdirector de Agricultura, pues le aseguraron que él era el único que daría el triunfo al partido en aquel municipio.
En el PRI también estaban ciertos de su derrota. Era aquella una derrota anunciada porque el contendiente era Rafael Pacheco Molina, dos veces presidente municipal del pueblo; pero, además, perredista que llegó al cargo abanderando la lucha contra los caciques Manuel Pérez Bonilla y Rigoberto Vázquez.
Sin embargo, el objetivo de Érick Lagos en ningún momento era exhibir a Jorge Schettino con el fracaso anunciado, sino evidenciar a su padrino político, el senador José Yunes Zorrilla.
Y cuestionarlo porque con todo y “Los niños de la fidelidad” anotados como precandidatos a la gubernatura en el año 2016, José Yunes se mantiene como puntero a la candidatura a gobernador 2016, por ahora, con la fuerza de su quinteto peñista, a saber: Luis Videgaray Caso, José Antonio Meade, Ernesto Cordero, Fernando Aportela y José Antonio González Fernández, concuño de Carlos Salinas de Gortari.
Y, por eso mismo, al rafaguear a Schettino Pérez el bombardeo llegaba, por añadidura, al senador Yunes Zorrilla.
El caso es que la institucionalidad priista se impuso y aceptó la candidatura.
EL CANIBALISMO PRIISTA
Se reproducía así la historia priista donde la elite en el poder ajusta cuentas con sus adversarios y enemigos.
Fue el caso, por ejemplo, de cuando en el chirinato Fidel Herrera saliera nominado candidato a diputado federal por el distrito de Boca del Río teniendo como candidato del PAN al ingeniero Alfonso Gutiérrez de Velasco, conscientes y seguros de que sería derrotado.
Pero como “El tío de Nopaltepec” nunca en su vida ha perdido ni un volado ni un juego de canicas salió vencedor.
Y también fue el caso de Felipe Amadeo Flores Espinosa, quien fuera enviado “a perder” como candidato a diputado federal por el distrito de Huatusco para favorecer el triunfo del clan de la familia de Rafael Ochoa, senador de la República y líder nacional del SNTE.
Y para sorpresa de la cúpula priista en Veracruz, Felipe Amadeo derrotó al gurú del SNTE, a tal grado que el gobernador le dejó de hablar durante tres meses.
A Schettino, sin embargo, le fue mal.
EL PASADO POLÍTICO LO CONDENÓ
Por aquí se registró, desde el otro lado, hasta con un candidato a la alcaldía nominado por el Partido Cardenista, Ángel Velázquez, el fuego amigo y enemigo se multiplicó por todos lados:
1) Tanto las huestes del candidato del PC como del PRD empezaron a repartir apoyos (techos, pisos, despensas, etcétera) a la población electoral, con un alarde económico sin precedente.
2) Mientras, el abanderado priista carecía hasta de tales recursos.
3) El pueblo se inundó de anónimos, reprochando al candidato priista que en su tiempo de funcionario público sólo había asfaltado el camino a su rancho.
4) Pero, además, desde el poder duartista había logrado créditos del programa “A fondo perdido” para familiares.
5) Además de revirarle su amistad con Miguel Ángel Yunes Linares cuando fuera secretario General de Gobierno y presidente del CDE del PRI con Patricio Chirinos Calero.
6) Y, por añadidura, hasta recordándole que entonces Yunes Linares le habría financiado una represa en su rancho.
Supo, entonces, y con más certidumbre, que estaba derrotado.
Incluso, el senador José Yunes lo acompañó en algunos de sus mítines y al cierre de campaña; pero de nada valió, pues el candidato perredista Rafael Pacheco Molina le ganó en las urnas.
Peor tantito si se considera que en segundo lugar quedó el candidato del partido Cardenista, Ángel Velázquez con más de dos mil votos de diferencia.
Y Schettino fue enviado al tercer lugar.
Schettino quedó sin la alcaldía y también sin la dirección de Agricultura de la SEDARPA.
Érick Lagos había logrado el objetivo encomendado: exhibir a José Yunes Zorrilla, no obstante que en contraparte ganara las presidencias municipales de Perote, Paso de Ovejas, Xalapa y Veracruz, además de algunas diputaciones locales, entre ellas, Perote, La Antigua y Cosamaloapan.
CABALLADA PRIISTA VA ENGORDANDO…
Por eso mismo es que en la plaza duartista han aumentado la caballada de precandidatos a la gubernatura 2016, con los nombramientos de secretarios del gabinete legal que se darán a partir de esta semana, a saber:
Alberto Silva, a Desarrollo Social; Fernando Charleston junior, a Finanzas y Planeación; Salvador Manzur, a Desarrollo Económico.
Pero, además, Érick Lagos, a la subsecretaría de Gobernación.
En tanto, en el gabinete ya está listo para lo que vendrá el secretario General de Gobierno, Gerardo Buganza Salmerón, a quien la Red Evangélica de Veracruz ha declarado su santo patrono.
Y también, claro, el secretario de Educación, Adolfo Mota Hernández, quien tiene su veladora prendida al senador Emilio Gamboa Patrón, alardeando que todos los días habla con el gobernador unas 20 veces, sea por teléfono y/o con los mensajitos en el celular.
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