Sapos y Alacranes
Por Orlando Segura Herver.
En el desfile del Primero de Mayo, hubo brotes de inconformidad y la aplastante posición de los sindicatos oficialistas.
Así, los jubilados y pensionados del SDTEV, se colocaron enfrente del presidium, del lado de la acera y paulatinamente fueron sacando sus pancarta en donde exigían sus justas demandas a la Secretaría de Finanzas y Planeación, pago puntual del seguro por muerte e invalidez de maestros, entre otras.
Los organizadores abrieron el magno desfile con un posicionamiento de la Unión Nacional de Trabajadores, en la que narraban que no les ha ido bien con las políticas laborales aplicadas a lo largo de los años recientes por el gobierno federal, .
El escenario fue propicio para explicar que la economía está estancada, los empleos son precarios, el salario ha decaido y el porvenir no se presenta nada halagueño.
A pesar del panorama gris por la instrumentación de la Reforma Educativa, los integrantes del Centro Regional de Educación Normal, marcharon alegres, sonrientes, al ritmo de una banda escolar.
Nada que festejar, la incertidumbre permea en todo el país, el aparato productivo resiente los ciclos negativos tanto externos como internos.
3 mil trabajadores aproximadamente, saludaron a los suyos, a los amigos y familiares que se apostaron sobre la avenida Juárez. Caminaban por tradición, con el peso y la carga de la crisis y de un futuro incierto.
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