Perfilando
* Ex alcalde panista pide mesura
Por Iván Calderón
Imagen:youtube.com
La apremiante situación que vive la entidad se ha convertido en un botín político por parte de las diferentes corrientes partidistas, principalmente del Revolucionario Institucional y del Acción Nacional.
Sin duda.
La llegada del líder nacional del PAN, Ricardo Anaya Cortés, en vez ayudar a la causa de los alcaldes de su partido y el de la Revolución Democrática, enturbia aún más las coyunturas sociales, ya que como todo un oportunista, busca los reflectores a favor de su acelerada pre campaña a la Presidencia de la República, dividendo al mismo albiazul, provocando ciertos recelos entre los simpatizantes de la otra aspirante, Margarita Zavala del Campo.
El hecho de politizar los legítimos reclamos de los ediles veracruzanos, tendrá inequívocamente consecuencias directas para con el gobernador electo Miguel Ángel Yunes Linares, quién por fin fue recibido en los Pinos por Enrique Peña Nieto y luego por el Secretario de Gobernación (y otro presidenciable) Miguel Ángel Osorio Chong.
Se tiene que decir, si el oriundo de Soledad de Doblado ya había limado asperezas con quienes mandan en la nación, la sola presencia de Anaya vendrá entorpecer seguramente los acuerdos a los que habían llegado días atrás.
La etapa negra que vive Veracruz, se ha convertido en caldo de cultivo perfecto para buscar un posicionamiento en la esfera nacional y estatal, ya que mientras la crisis económica ahorca a los veracruzanos, son tanto panistas o priistas quienes se suben a este barco para sacar provecho mediático en todos sus contextos.
Tal es el caso del alcalde de Xalapa, Américo Zúñiga Martínez, quién se ha autonombrado líder de los alcaldes rojos del estado y con la ayuda de su padrino el senador José Yunes Zorrilla, utiliza muy bien esta tesitura para luego de que pase la tormenta, buscar ahora sí, la presidencia del Comité Directivo Estatal del PRI y luego el Senado, con todas las propiedades de un "político" de estado.
Si no me creen, al tiempo.
Las y los veracruzanos que no viven de la política, ya no aguantan más estas disputas partidistas. Los diferentes sectores de la sociedad sólo exigen justicia y lejos de los bloqueos o de las manifestaciones, anhelan una tregua para realizar sus actividades cotidianas en paz.
Con lo anterior, surge la voz de un ex alcalde panista y presidente de una asociación civil denominada "Despierta Veracruz", quién ha señalado que es momento de caminar por el sendero del dialogo y no por la línea de los enfrentamientos.
De esta forma, es Raúl Sosa González, un personaje que ha logrado colocar a su municipio Santiago Tuxtla como un bastión panista, quién argumentó que ya no se puede alentar la ingobernabilidad como política social, y que existen métodos institucionales y legales para buscar soluciones a esta triste fase que atraviesa Veracruz.
Es cierto, la falta de recursos para obras y el combate a la pobreza afecta directamente a la población, sin embargo, un bloqueo carretero como los que ya se están haciendo costumbre, son un castigo adicional al pueblo.
Cuanta razón tiene el ex primer edil tuxtleco Raúl Sosa, al enfatizar que es claro que los alcaldes deben de solicitar una mesa de negociación para el salvamiento de la entidad, donde se involucren a los tres niveles de gobierno, sentando las bases reales del rescate financiero.
Tal y como lo diría Sosa, así como muchos que pensamos igual, los remedios ya no radican en más manifestaciones, tomas de casetas, o carreteras. No se pueden combatir delitos, con otros delitos. Y por ende, todos los involucrados deberían ser parte de la solución y no de los problemas.
Veracruz ya no da para más.
Es momento del dialogo y la concertación.
POR CIERTO, ¿de donde saldrá el dinero para mantener sitiada el Palacio de Gobierno y la casa Veracruz?, si lo que reclaman es efectivamente "lana", estos movimientos no se pagan sólos.
@IvanKalderon
Ivancalderonflores@outlook.com
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